Bastante tiempo antes de su regreso al fútbol argentino para luchar la permanencia con Newell’s y enseguida salir campeón, Maximiliano Rodríguez gozaba de un gran presente en el Atlético Madrid. Aunque tenía contrato vigente, el Liverpool apareció en su camino y el volante que también brilló en la selección argentina se dejó llevar, armó las valijas y se mudó a Inglaterra. Fue a principios de 2010, seis meses antes de disputar su segundo Mundial en Sudáfrica.
En un vivo de Instagram junto a Juan Pablo Sorín, la Fiera recordó: “Me vengo a pasar Navidad (a Rosario) del Atlético Madrid. Me bajé del avión y tenía muchas llamadas perdidas de un número oculto y de mi representante, un español. Me dijo ‘Maxi, te está llamando Rafa Benítez, atiéndelo que quiere hablar con vos. Quiere que vayas para Liverpool’. Yo ya había hablado con Mascherano (jugaba en los Reds) y Fernando Torres, que había jugado en Atlético. Cuando me habla Rafa me da 48 horas para decidir si iba o no”.
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El hoy capitán de la Lepra sacó a relucir su buen andar en el Colchonero, donde era capitán y se sentía muy a gusto con la ciudad y el trato recibido. Pero el fútbol inglés lo volvía loco y el reto lo cautivó: “Quise ver si podía triunfar ahí”. Y para que la transferencia prosperara, tuvo que mentirle al entrenador español: “Él me dijo que quería que en el vestuario hablaran todos inglés. ‘¿Vos sabés?’, me preguntó. Le dije que se quedara tranquilo, que sí, que no se preocupara. En realidad yo no quería que se cayera la operación”.
Luego detallé: “Se da todo, llegamos allá, conferencia de prensa y Rafa me dice ‘Maxi, primero empiezo yo y después seguís vos’. Le digo ‘Rafa, te tengo que confesar algo. No sé nada de inglés, lo único que se decir es hello, no te dije porque no quería que se cayera la operación’. Me dijo ‘nooo, sos un hijo de p...’. Nos cagamos de risa ahí y después tuve que aprender inglés ahí. Me largué a hablar, me costó un poco”.
Antes de su retorno triunfal a Rosario, Maxi se dio el gran gusto de ganar la Copa de la Liga inglesa con el conjunto inglés, en el que dejó un muy buen recuerdo. Incluso la hinchada le dedicó una canción: “Que en esos dos años y medio que estuve me agarraran ese cariño es algo muy lindo porque es un club tan grande... Te das cuenta estando ahí de lo grande que es. Y que te hagan una canción siendo argentino con la rivalidad... Me tocó gente maravillosa”.
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