Este domingo por la mañana se conoció la triste noticia de la muerte de Melody Pasini, la novia del futbolista de Vélez Ricardo Centurión. La joven manejaba su auto por las calles de Lanús Este y falleció producto de un paro cardíaco que la hizo perder el control del vehículo.
Por estos días, Melody, de 25 años, se encontraba realizando la cuarentena obligatoria por la pandemia de coronavirus. Aún no se sabe el motivo por el cual salió del domicilio y se dirigió a la zona sur del conurbano bonaerense.
Fanática de Racing. Así se mostraba la joven en sus cuentas en las redes sociales. Tanto en Instagram como en Twitter, La Academia tenía un papel preponderante. “De Racing como mi abuelo y mi viejo”, dice aún en su biografía. Las fotos en el Cilindro de Avellaneda abundaban en sus perfiles.
En Racing se inició como futbolista Centurión, con quien estaba en pareja hace unos cuatro años. No solían mostrarse juntos en fotos en las redes sociales, aunque ella había estado junto a él durante su paso por equipos del exterior como Genoa (Italia) y Atlético San Luis (México).
Su amor por la Academia no impedía que Melody acompañase a su novio en otros tramos de su carrera, como cuando pasó por Boca Juniors. Su vínculo se había establecido antes de que el futbolista fuera denunciado en mayo de 2017 por violencia de género a raíz de una agresión a su ex novia en un boliche.
Al ser informado de la muerte de su novia, Centurión se acercó hasta el lugar en el que quedó el auto que manejaba Melody y rompió en llanto. Reportes policiales, a raíz del llamado de los vecinos, hablan de un hombre a los gritos en plena vía pública (más tarde se constató que se trataba de Ricky).
Es una incógnita cuál era el estado actual de la relación de la joven pareja ya que, sumado a que no había fotos recientes de ambos juntos, ya no se seguían en Instagram.
En las últimas 24 horas, Melody había publicado varios mensajes. Entre ellos, recuerdos de salidas con amigos y de su infancia, e imágenes actuales de su perro. También llamaba a sus seguidores a participar de una consigna: “¿Mentir y ocultar en ciertas situaciones, es lo mismo? “.
En Twitter, en tanto, había dado cuenta de su insomnio y de los problemas para dormir que le estaba trayendo la cuarentena. “Hola, sí, quisiera dormirme por favor”, escribió para luego agregar “Las 6 de la mañana lpqmp !!!!!!!”. Ese fue su último mensaje: solo unas horas más tarde se produciría el fatal desenlace.
Una vez que se hizo pública la noticia del fallecimiento de Melody, sus perfiles en las redes sociales se inundaron de mensajes de dolor y condolencias. Amigos, allegados y hasta desconocidos que se sintieron conmovidos por lo ocurrido ingresaron a sus publicaciones para dejar comentarios de despedida y de apoyo a la familia.
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