El Atalanta atraviesa uno de los mejores momentos de su historia tras clasificarse a los cuartos de final de la Champions League y mantenerse en el cuarto lugar de la Serie A. Su capitán es el argentino Alejandro Gómez, quien aportó detalles de la situación que se vive en Italia por el coronavirus. El club está situado en Bérgamo, una de las zonas más contaminadas por la pandemia.
Hoy se dirigió a la institución para hablara con los dirigentes y definir los pasos a seguir. El Papu reveló que en territorio italiano se conocieron 10 mil casos y en la ciudad de Bérgamo unos 400. Se suspendió el fútbol a nivel local y continental (Champions y Europa League). Luego de informarse el caso positivo del futbolista de la Juventus Daniele Rugani estarían decididos hasta parar con los entrenamientos. Los directivos lidian con las presiones de la TV y los sponsors pero la pelota no rodará hasta, al menos, el mes de abril.
“Acá cambió completamente la rutina. Hace 15 ó 20 días que los chicos no van al colegio. Hace una semana estaba todo muy light, la gente no entendía el riesgo ni tomaba dimensión verdadera del peligro. Los centros de ski estaban llenos, la gente salía a pasear y comer en restaurantes como si nada. Desde el decreto del gobierno todos empezaron a quedarse en sus casas. Hay 300 contagiados por día y está muriendo gente. Es un problema nacional y mundial. Hasta hace una semana estaban todos como si nada y ahora es una ciudad fantasma”, expresó en Planeta 947 (Radio Club 947).
Por otra parte, el futbolista de 32 años dio alerta sobre una crisis sanitaria importante teniendo en cuenta la cantidad de casos positivos de coronavirus y la falta de camas y lugares en los centros hospitalarios para asistir a los contagiados: “Los hospitales están llenos, la gente se está contagiando y muriendo. Hay una crisis muy importante y no va a parar”.
Respecto a la vida cotidiana, contó que los únicos negocios que permanecen abiertos son los supermercados (está explotando la venta online) y farmacias. Para salir a la calle exigen que sea con guantes de latex y mascarillas. La primera determinación que se tomó fue cerrar las escuelas por los chicos. Más tarde fue el turno de los museos, teatros, cines y shoppings. Finalmente también se suspedieron los eventos deportivos y shows musicales. “Esto es una película de terror, no estoy exagerando”, fue la dramática descripción.
Ayer se disputó el encuentro de vuelta entre Liverpool y Atlético Madrid en Inglaterra por los octavos de final de la Champions League y Gómez reflexionó: “No podía creer que estuvieran jugando con gente. No se puede estar más en contacto y la gente no lo entiende. A nosotros nos tocó jugar en Valencia y no hubo ningún control en el aeropuerto pese a que veníamos de la peor zona del mundo. En España hay 2.000 casos pero están como nosotros hace 15 días atrás. No toman dimensión de lo que está pasando. Hace poco celebraron un carnaval de 10 mil personas en la calle”.
El jugador surgido en la cantera de Arsenal de Sarandí aprovechó la oportunidad para concientizar a la población de Argentina: “Tienen que tomar dimensión de verdad, no es para joder ni reírse. Hay que tomar todas las precauciones, quedarse en casa y dejar la vida social atrás porque el contagio es altísimo. El virus está en el aire, no se mueve y las personas jóvenes tal vez tengan más oportunidades pero los ancianos se están muriendo. Hay que estar muy atentos”.
Y concluyó: “Está bueno que la gente empiece a preocuparse y tomar recaudos. Usar alcohol en gel, lavarse las manos, evitar el contacto con la gente, no mandar a los chicos a la escuela o reunirse con gente que llega de Europa de algún país infectado. No va a parar esto, el contagio es fácil y se va a expandir por todo el mundo, es una pandemia. Hasta que no encuentren la cura no va a parar".
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