Los violentos incidentes que se vivieron este domingo con la barra de Nueva Chicago en la previa del partido ante Temperley en Mataderos dejaron un saldo de cuatro detenidos y al menos dos heridos de consideración. A pesar de la gravedad de los hechos el encuentro se disputó igual y, con el correr de los horas, la justicia contravencional decidió clausurar el estadio. Los desmanes fueron producto de una interna entre distintas facciones de la hinchada del Torito.
Los heridos por la batalla campal fueron trasladados al Hospital Santojanni y este lunes salió a la luz una foto que da cuenta de las lesiones que sufrió uno de los hombres que estaba en la tribuna. Omar Olivera compartió en su cuenta de Facebook una imagen de su hermano Lucas, quien evidencia numerosos cortes y golpes en la cara y en el torso. El hombre asegura que la víctima de la golpiza y los facazos no tiene vínculos con la barra, que “es hincha y socio desde que nació”.
“Recién lo dejé en su casa, así dejaron a mi hermano algunos muchachos que dicen ser de Chicago como nosotros, en la misma tribuna que antes nos defendiamos entre todos y quiero aclarar que Lucas no pertenece a ninguna fracción (sic) de la barra, que es hincha y socio desde que nació. Pobre Chicago, lo están haciendo mierda amigos, me quitaron las ganas de seguirte, nos matan la pasión”, escribió Olivera.
Las imágenes que logró captar la televisión en la previa y una vez comenzado el partido entre Nueva Chicago y Temperley (que se jugó completo y terminó 1-1) fueron contundentes. Los violentos entraron a una de las tribunas con palos y facas, y se enfrentaron a los integrantes de la facción rival. Según supo Infobae, el conflicto estalló por un cortocircuito fuera del estadio vinculado al reparto de entradas y a que el denominado grupo de Tablada no recibió la cantidad suficiente.
Los incidentes en el estadio de Nueva Chicago se suman a los graves hechos de violencia ocurridos el pasado fin de semana. También por el torneo de la Primera Nacional debió suspenderse a los cinco minutos de juego el duelo entre Independiente Rivadavia de Mendoza y Atlanta. Integrantes de la barra local ingresaron a la tribuna con facas y amenazaron a los presentes. Luego, prendieron fuego varias banderas. Un día más tarde, en las calles de Bahía Blanca, un hincha de Olimpo murió de un disparo en medio de un enfrentamiento entre las hinchadas del equipo Aurinegro y Villa Mitre, el clásico rival. El partido se disputó a pesar de que ya se conocía la noticia del fallecimiento del joven de 28 años.
A raíz de esta escalada violenta, la AFA emitió un comunicado para repudiar estos episodios y ponerse a disposición de las autoridades para colaborar con las respectivas investigaciones.
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