En un marco espectacular, Boca y River se vuelven a enfrentar por la Copa Libertadores de América, en esta ocasión en el marco de la revancha de la semifinal que en la ida disputada en el Monumuental acabó 2-0 en favor del conjunto que hoy es visitante.
Cuando los dos equipos saltaron al campo de juego de La Bombonera, las cuatro tribunas explotaron con el típico “Esta campaña volveremos a estar contigo”, mientras volaban miles de globos azules y amarillos, y los clásicos papelitos blancos. Esto en un marco extraordinario con más de 50 mil personas que colmaron las gradas desde temprano.
Todo esto acompañado de fuegos artificiales y de bengalas de humo y luces que conformaron un ambiente espectacular para un duelo trascendente que quedará en la historia más allá del resultado. Uno de los dos equipos más importantes de la Argentina conseguirá este martes el pasaje a la final del torneo más preciado del continente y el otro quedará eliminado.
Obviamente, el duelo se juega sin público visitante, por lo que el público de River organizó un banderazo en la previa. Miles de personas se reunieron en el Monumental y desde las 17 horas comenzó una verdadera fiesta en Núñez para alentar a los futbolistas Millonarios, quienes partieron desde allí hacia La Boca acompañados de un megaoperativo de seguridad.
Tras la salida de los equipos, el público Xeneize cantó contra la Conmebol, le recordó a su eterno rival su paso por la B Nacional en 2011 y pidió “ganar cueste lo que cueste” esta noche. Mientras, personal del club equipado con sopladoras se encargaron de limpiar el césped de los papelitos que impedían la clara visualización de las líneas que limitan el campo de juego. Esto generó un retraso de casi 15 minutos, según lo que estaba estipulado inicialmente por la Conmebol.
En la ida, River ganó 2 a 0, por lo que Boca necesitará un triunfo similar para llegar a los penales o más holgado para conseguir el pasaje directo. En caso en que el conjunto de Marcelo Gallardo convierta un tanto, los dirigidos por Gustavo Alfaro deberán marcar al menos cuatro para imponerse en la llave.
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