Toti Pasman, a 10 años del “la tenés adentro”: “Maradona me subió al ring del debate futbolístico”

Con el gol de Palermo en el minuto 92, Argentina le había ganado a Perú en un Monumental anegado. Los hinchas y el plantel viajaron a Uruguay con la esperanza a flor de piel. Hasta la noche del 14 de octubre de 2009 podía pasar cualquier cosa en las Eliminatorias. Sin embargo, el destino quiso que Mario Bolatti convirtiese su gol en el Centenario, que Colombia perdiera y que la selección argentina obtuviera su boleto al Mundial de Sudáfrica 2010.

Más allá del logro deportivo, ese día pasó a la historia por lo que sucedió en la conferencia de prensa que Diego Maradona brindó en el mítico estadio Centenario de Montevideo. Exultante por el triunfo, enojado por las críticas, el entonces director técnico del equipo argentino se despachó con un catarata de insultos.

“Al que no creía, a los que no creyeron, con el perdón de las damas, que la chupen, que la sigan chupando. Yo soy blanco o negro, gris no voy a ser (nunca) en mi vida. ¿Eh? ¿Ustedes me trataron como me trataron? Sigan mamando. Ahora otra pregunta”, lanzó el DT. Sólo el sonido de algunos flashes quebró el silencio que se produjo tras la declaración de Maradona. Como reguero de pólvora, la noticia recorrió los hogares y las redacciones del mundo.

Una a una se fueron sucediendo las preguntas y las respuestas del DT. Entre los presentes, en esa sala de prensa se encontraba el periodista Juan Carlos Toti Pasman. Y él fue el blanco de otra reacción desmedida de Maradona: “Vos, también, Pasman. Vos también la tenés adentro”.

Hoy, 10 años después de aquella conferencia, Toti Pasman recibió a Infobae en su casa y dio detalles de aquel miércoles, de la cobertura que realizó junto a Darío D’Amore para América TV y A24. “Uno tenía que ir al vestuario a hacer (entrevistar) a los jugadores y otro, a la conferencia. Siempre me gustó ir a la conferencias de prensa en la etapa de (Daniel) Passarella, (Marcelo) Bielsa, (José) Pekerman. De la platea fui directo a la sala de prensa y un poco lo que sucedió en el campo de juego, el festejo de Diego con (Carlos) Bilardo después del partido, me lo perdí”, relató.

Consultado sobre si sospechaba que podía suceder algo como lo que vivió, Pasman asintió. “Hasta ese momento no tenía ni trato ni relación con él. Pero por laburar en América y en radio La Red y como había sido crítico, sabía que me podía salir con algo así. Me sorprendió, pero sabía que era una oportunidad para mí porque el que me estaba atacando era Maradona. Él me estaba subiendo al ring del debate periodístico, futbolístico”, reconoció.

Lejos de amedrentarse por el agravio, Pasman hizo las preguntas que tenía pensadas para el entrenador argentino. “Le pregunté por la relación con Bilardo y antes del Mundial lo limpió; le pregunté por (Sebastián) la Brujita Verón, me dijo que estaba todo bien y hoy está peleado a muerte; y le pregunté si iba a dirigir en Sudáfrica y así lo hizo. A partir de esa noche, obviamente, logré un protagonismo que hasta ese momento no tenía en los medios, me puso bajo la lupa. Sentía que cada cosa que decía hasta Sudáfrica tenía un plus por esa disputa con Maradona”.

Del agravio al libro

Tras el insulto de Maradona, la frase “la tenés adentro” se transformó en parte del patrimonio cultural-coloquial de varias generaciones, una abreviatura inconfundible, un hashtag, un cliché. Y para Pasman fue una oportunidad de plasmar un sueño postergado. “En las vacaciones del verano de 2010, mientras tomaba sol, se me prendió la lamparita y dije acá tengo el libro. Más allá de la frase, yo cuento en el libro cómo (Alfio) Basile se siente traicionado por algunos jugadores, cómo Maradona se mete en la Selección cuando va a los Juegos Olímpicos de Beijing y con el aval del Checho Batista, él empieza a entrenar a los jugadores y es allí donde lo mira a (Sergio) Romero como su futuro arquero. Los vaivenes en la relación con (Julio) Grondona, con Lionel Messi. De 2008, año en el que asume como DT, hasta el 4-0 con Alemania pasó de todo. Se podían contar 10.000 historias”.

Lo que para Pasman había sido un disparador, terminó siendo el título de su primer libro. “Laburaba con (Luis) Majul en la radio y cuando le cuento la idea me dice: ‘El libro se tiene que llamar “La tenés adentro”’. Luis venía de hacer uno de los libros más vendidos de la historia de la Argentina, Él y Ella. Y así fue que le hice caso”.

Sudáfrica, reconciliación y Gimnasia Esgrima de La Plata

En la tierra de Nelson Mandela, las conferencias de prensa para Pasman tampoco fueron cosa sencilla. Si bien no se acercó al clima hostil que vivió en el Centenario, los ánimos de Maradona para con el periodista eran muy cambiantes. “Era una relación de de amor y odio. Diego pasaba de tirarte una buena a querer comerte crudo. Tenía momentos de buena onda y había otros, como yo le preguntaba siempre al límite, en los que se enojaba o me ponía una cara de pocos amigos”, señaló entre risas.

Más allá de la eliminación, el 4-0 sufrido ante Alemania fue un baño de realidad para Maradona, la medianoche en la que todo se convirtió en calabaza. “En 2010, Diego llevaba la dirección técnica con una gran soberbia por haber sido el más grande dentro de la cancha. Ese golpe lo ayudó a bajar varios cambios”.

De regreso en Buenos Aires, Pasman y Maradona recompusieron su relación en uno de los momentos más difíciles para el campeón del mundo. “La primera vez que volvimos a hablar fue en Desayuno Americano, el programa que conducía Pamela David, cuando Doña Tota estaba mal de salud - murió en noviembre de 2011 - le deseé que todo estuviera bien y él me contestó muy bien. Hicimos un par de notas más en El Show del Fútbol y en la radio. Después me lo volví a encontrar cara a cara en el Mundial de Brasil. Me mandaron a hacer un móvil en la puerta del hotel donde se hospedaba Diego, en Barra de Tijuca. Lo encaré y le pregunté: ‘¿Empezamos de cero?’ y él respondió: ‘Ya está, Pasman. Olvidate’”, enumeró.

Mandiyú, Racing, la Selección, Al-Wasl, Fujairah y Dorados de Sinaloa habían formado a Diego en distintos aspectos, con experiencias y resultados muy diferentes. El domingo 16 de septiembre, Maradona inauguró en Gimnasia un nuevo capítulo director técnico, el tercero en un club del fútbol argentino.

“Creo que haber asumido en Gimnasia es una jugada arriesgada porque lo agarró 10 puntos abajo en el promedio, es un fierro caliente, una papita que se está quemando. Creo que tiene mucho para ganar: si le va bien, es toda de él. Hoy, desde el banco, Diego está mucho más maduro, sabe cuáles son sus virtudes y cuáles son sus defectos. Si salva al Lobo del descenso, eso lo pone en carrera, creo, para dirigir a Boca”, concluyó.

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