Tras el 2-0 de River ante Boca por la primera semifinal de la Copa Libertadores, Alejandro Fantino había dejado sus primeras observaciones en su programa de TV, Animales Sueltos. Allí, había puesto la mira sobre el VAR: “Me pareció vergonzoso cómo mostraban la repetición del penal que le dieron a River. Por ahí fue penal, pero lo pasaban para atrás y para adelante... ¿Viste cuando te vas de joda con tus amigos? Y uno se tira a la pileta, se tropieza, lo grabaste y lo ves de nuevo: “Ponelo al flaco cómo se cayó...” Era una cosa increíble. Si lo pasas así, claro que te da penal. De todas maneras puede haber sido penal, pero ese penal te abre el partido”.
Ya procesado lo ocurrido en el Monumental, el periodista realizó un fuerte editorial en su show radial, en La Red. Allí, el rol de la Asistencia Arbitral por video pasó a un segundo plano. “No hablo del VAR porque me anclo en el pasado, quédense con lo que viene. Me chupa un huevo el VAR, ¿nos chorearon? Nos chorearon, no lo voy a llorar. Me preparo para lo que viene”, subrayó. Y elaboró una arenga para hinchas, directivos, jugadores y cuerpo técnico de Boca, de cara a la revancha del 22 de octubre. “Podría hacer una editorial como periodista y no como hincha de Boca. Esa estupidez, idiotez de mis colegas de decir, soy hincha de Dálmine, de Banfield, de Atlanta, para esquivar el bulto. Yo no lo hago. Estoy en un día que prendés un fósforo y vuela todo”, prologó, advirtiendo sobre la intensidad de sus palabras.
“Más allá del VAR, River juega bien, de verdad; es un gran equipo. El arquero (Armani) es el de la Selección, el 4 es el de la Selección, el 2 también, el 6 lo fue, el suplente es el 6 de Chile, el 3 es el de la Selección, Enzo Pérez es de Selección, jugó el último Mundial. Nacho Fernández, Exequiel Palacios; De la Cruz es extraordinario, tiene unos huevos grandes como una casa. Borré es jugador de la selección colombia, Suárez fue a la Copa América, jugó al lado de Messi; el técnico es de Selección. No viene ganándote un equipo que decís, tuvieron orto, no. Son un gran equipo, tienen un gran técnico y no hay que ser zonzos y no reconocerlo”, buscó poner en valor lo realizado por el Millonario.
Pero fue allí donde levantó temperatura, haciendo base en todo lo conseguido por Boca a fines de la década del 90 y en la del 2000. “Yo pertenezco a una generación criada en la época más gloriosa de Boca. Hoy estoy acá porque me formé bajo el paraguas de esa generación que te enseña a encarar la vida con una mirada diferente a la de los demás. Me crié como jugador, viajé en el micro o aviones con el plantel, me quedaba en el mismo hotel, charlaba con Bianchi, Chicho Serna, Barros Schelotto; con todos. Me crié en una época en la que un 2-0 lo dábamos vuelta, papá. Me crié en esa generación. Boca me dio todo, llegué en 1992, y mi carrera es por Boca, le debo a todo. Hoy los escucho a los de Boca, a mis hermanos, a dirigentes, jugadores, y están golpeados, caídos... ¿Qué les pasa, manga de boludos? Lo vamos a dar vuelta este partido, no nos ganaron 3-0, 4-0. En mi cancha, con 50.000 personas gritando hasta el último minuto del encuentro, lo vamos a dar vuelta”, inició su arenga. “Yo me crié con Bianchi, con una generación de jugadores que nos hacía creer todo el tiempo. A nosotros nos ganaron 2-1 en cancha de River y en nuestra cancha se lo ganamos con un gol de Palermo rengo y en muletas; el Tolo Gallego y sus muchachos se nos cagaban de risa y se lo ganamos. Yo estoy criado en el triunfo”, continuó encendiendo los corazones auriazules.
Con ese concepto, le envió un ultimátum a Gustavo Alfaro, entrenador del Xeneize, en relación al caso Tevez. “Para hacer lo que se puede hacer, primero, a cambiar el ánimo. Tenemos un arquero (por Andrada) que es Fillol del 78. Tenemos dos centrales del carajo, como Izquierdoz y López. Le doy todo el poder a Tevez de acá al partido. Caerle al técnico sería mala leche. De mi parte, no, porque dije que sabía lo que quería. Le salió mal. Ahora sí, Alfarito, no rompas más los huevos, es momento de que te apoyes en los que conocen cómo es la verdadera historia de Boca. Es uno que tiene la serie en Netflix y es Tevez, ese al que a veces forreás y boludéas. Él te tiene que elegir a los jugadores; él, Carlos Tevez. No Soldano, lo banco, pobre, lo respeto, sería mala leche, de cagón, caerle a Soldano. Alfaro, asociate a Tevez, unite, sumalo como si fuese un ayudante técnico, que juegue Tevez en la vuelta, poné una defensa que te mantenga el cero, en el que no tiene lugar Mas, sufrió el partido Mas, cerrame la defensa. Ponemelo bien al italiano”, fue entregando tips, a partir de algunos nombres que posteriormente fustigó.
“Dicen: ‘Porque si River te hace un gol, tenés que hacer cuatro’. Y hay que ver si hace un gol. ¿No puede haber un cabezazo de Izquierdoz antes de los 20, un gol de Tevez, de Salvio, que nos den un penal una vez? No podemos ir a penales y ganar, ¿qué tenemos? ¿Un manco en el arco? ¿Qué le pasa a la gente de Boca?”, volvió a aguijonear a los fanáticos, para que no pierdan la fe tras el resultado adverso. Y comenzó con la parte más crítica de su discurso.
“Este partido lo vamos a dar vuelta, confío en mis jugadores, en mi club. No en aquellos que se congelan, eh, no es para congelados esto, es una batalla final, es un partido para los que tienen sangre en las venas. Es para terminar vomitando con látigo en la panza, eh, no para volver caminando. Marcone, no se vuelve caminando, papito, eh. No es Patio Bullrich para comprarle una cartera a tu esposa, eh. Esto es Boca, papito. Mas: la cara de susto que teníamos ayer... Cambiá el chip, Quique Hrabina comía pasto, el chapa Suñé, Marzolini, el Vasco Arruabarrena, chispeate con esa cabecita si querés jugar en la primera de Boca. Como se chispearon Izquierdoz y Licha López. Basta con esto de sentirse derrotados, derrotados las pelotas”, apuntó dos nombres de los que mostraron un rendimiento pobre en el Monumental.
Luego, Fantino dio su fórmula para que Boca dé vuelta la llave. “A los que jueguen: a lo Boca, viejo, eh. Y no es pegando patadas. No estoy de acuerdo con la idiotez de cagarlos a patadas. Es ganarles con vehemencia, con intención, que no dé más el aire. Así hay que jugar, al desmayo físico, a trabar cada pelota, correr más, no tienen a Usain Bolt en lugar de Casco, eh. Señores, ¿ustedes creen que yo teniendo el 9 que tengo no le puedo ganar a River? Tengo un 9 con huevo que es Wanchope (Ábila), tengo a Carlitos que les ganó mil veces. Tengo al 5 de la selección de Italia (por De Rossi)... Si ustedes están derrotados, no soy como ustedes. Derrotado, las pelotas de Magallanes. Y hay que ganar el partido desde ahora, con mística, abrir las prácticas de Boca. Apoyar, a llenar la práctica. El día de la cancha, mezclo glorias en el micro del plantel. Llamo a Román, venite, acompañalos. ¿Alfaro es un técnico de equipo chico? Le vamos a explicar. Yo creo que todo es posible. Le gané al Real Madrid, a Roberto Carlos, a Zidane, a los mejores del mundo; al Palmeiras allá, ¿no le voy a ganar a River?”, concluyó.
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