Gimnasia perdió ante River su séptimo partido consecutivo en la Superliga; tercero en la era Maradona. El Lobo está anteúltimo en la tabla de los promedios, sólo encima de Central Córdoba de Santiago del Estero, que divide por una temporada. La situación es preocupante tanto para los hinchas como para el plantel. Por eso, más allá de que la presencia de Diego actúa como paraguas momentáneo (de hecho, se acercó a la popular tras el duelo y les pidió disculpas a los fanáticos, alambrado de por medio), ya hubo algunos silbidos y manifestaciones en contra de Gabriel Pellegrino, presidente de la institución.
El sábado, desde las 13.15, Gimnasia se medirá ante Godoy Cruz en Mendoza, en un partido decisivo para su suerte. ¿Y para Maradona y su cuerpo técnico? Para el Diez, la puerta que le abrió el Tripero es invaluable: representó la oportunidad de volver a dirigir en el fútbol argentino luego de su pasó por la Selección, que finalizó en el Mundial de Sudáfrica 2010. Por eso, en la charla que mantuvo con el presidente tras el encuentro, incluso a la vista de las cámaras de la transmisión oficial, le dejó subrayada su postura en medio de la mala racha.
“Ni en pedo me voy. Estoy metido hasta los huevos con Gimnasia”, le dijo Maradona a Pellegrino, descartando cualquier decisión intempestiva ante otro tropiezo. Desde el arribo del astro, de 58 años, al club, el Lobo perdió 2-1 ante Racing y Talleres, respectivamente, y 2-0 ante el Millonario en su última presentación. En pos de buscar la recuperación de su equipo, Diego ya estuvo trabajando desde lo motivacional, para que sus dirigidos no se derrumben. Y, al mismo tiempo, junto a sus ayudantes Sebastián Méndez y Adrián González, apunta a refrescar la alineación con juveniles que no sientan tanto sobre sus espaldas, tales los casos de José Paradela y de Confite Matías Miranda.
SEGUÍ LEYENDO: