El futuro incierto de Luis Scola: los consejos que recibió de sus ex compañeros de la Generación Dorada para llegar óptimo a Tokio 2020

Miembros de la Selección que ganó la medalla de oro en Atenas se refirieron al momento que atraviesa el capitán del equipo que lidera Sergio Hernández. Si bien Luifa no lo confirmó, todos tienen la esperanza de que llegue a los Juegos Olímpicos de la capital japonesa con 40 años

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Luis Scola fue elegido en el quinteto ideal del Mundial y fue clave para que Argentina llegue a la final
Luis Scola fue elegido en el quinteto ideal del Mundial y fue clave para que Argentina llegue a la final

Será el Nuevo Pibe de 40. La posta que dejó Manu Ginóbili en Río 2016 la deberá tomar Luis Scola cuando llegue a las cuatro décadas. El último sobreviviente de la Generación Dorada debe resolver en qué equipo jugar para llegar en óptimas condiciones a Tokio 2020.

En un grupo en el que se divierte y hace historia (subcampeón en el Mundial de China) Luifa coquetea con postergar su retiro para llegar por quinta vez a un Juego Olímpico, aunque para ello debe conseguir un lugar que le permita mantenerse en la alta competencia para no perder el nivel que lo caracteriza.

“Todo depende de él y de cómo resuelva la temporada. Habrá que ver dónde va a jugar, porque es un megatrabajador y está muy apto para llegar a los Juegos Olímpicos. Igualmente, se va a tener que cuidar, porque nosotros queremos que llegue bien a Tokio y que no queme las naves antes”, analizó Carlos Delfino en diálogo con Infobae.

Real Madrid, Baskonia, Armani Exchange Olimpia Milan, Ferro, Boca, San Lorenzo y algún representativo chino son algunas opciones que circularon en el ambiente, pero según su representante sólo el Xeneize se puso en contacto para conocer su situación.

Yo no le voy a pedir nada, porque son decisiones personales. Él nunca me dijo nada cuando yo me quería retirar. Tiene que tomar una decisión tranquilo y nosotros lo vamos a apoyar”, deslizó Andrés Nocioni, a sabiendas del deseo interno que tiene su ex compañero.

La hazaña lograda en China, donde se le ganó a potencias como Francia o Serbia, representa una motivación adicional para el capitán argentino. “Luis le aporta mucho a los chicos con su experiencia y sus consejos”, remarcó Walter Herrmann en relación a la importancia que tiene Luifa dentro del grupo. “El Mundial que hizo esta generación tiene que estar en el Top 3 de nuestra historia. Le ganaron a potencias de Europa, ojalá puedan seguir en este camino”, completó el Chapu.

El Chapu Nocioni, el Lancha Delfino, Manu Ginóbili y Luis Scola en las semifinales de Río 2016 ante el Dream Team (@FIBA)
El Chapu Nocioni, el Lancha Delfino, Manu Ginóbili y Luis Scola en las semifinales de Río 2016 ante el Dream Team (@FIBA)

Con el antecedente de Río 2016, donde se formó parte del recambio del plantel, Delfino remarcó que “en el básquet no hay edades”. El Lancha fue uno de los encargados en transmitir el ADN de la Generación Dorada a los Campazzo, Laprovittola o Vildoza. “No éramos los viejos contra los Millennials, porque no les dábamos ningún sermón. Así como nosotros aprendimos de Milanesio, Campana y Montenegro, ellos habrán tomado cosas de nosotros”, analizó.

Es un orgullo que estos chicos hayan copiado nuestros valores. Ahora se tiene que dejar de hablar de la Generación Dorada para empezar a hablar de ellos. Tienen mucho mérito, porque es muy difícil trabajar a la sombra de un equipo que ha trascendido tanto. Brillan con luz propia”, insistió el Chapu.

Ellos están alejados, pero siguen comprometidos con cada presentación albiceleste. La actividad en el grupo de WhatsApp que integran los héroes que se subieron al escalón más alto del podio en Atenas aumentaba minuto a minuto cada vez que el combinado de la Oveja Hernández jugaba en Asia. “Cuando terminaban los partidos me agarraba un subidón tan grande que tenía que salir a correr. Fue increíble lo que hicieron en China", recordó Delfino.

Sin embargo, el hecho de haber llegado a la final dejó la vara demasiado alta. En un país exitista, donde sólo se reconoce el mérito por el título, la presión por conseguir una medalla en la capital de Japón podría afectar el clima interno. “Cuando competís, querés jugar contra los mejores. Se tienen que hacer responsables de lo que han logrado. Creo que los rivales también le tienen un respeto muy grande a la Argentina, porque si miramos el ranking FIBA seguimos estando arriba”, destacó el Lancha.

No tienen que presionarse con llegar al podio. Tienen que disfrutar de los torneos. Al Mundial fueron a buscar la clasificación a Tokio y llegaron a la final”, añadió Herrmann, en referencia al certamen que sólo contará con 12 participantes distribuidos en dos zonas de seis (los cuatro primeros avanzarán a los cuartos de final). Con Japón, Nigeria, Estados Unidos, Irán, Francia, España, Australia y Argentina ya clasificados, sólo resta saber la presencia de otros cuatro seleccionados. Con la ilusión de repetir lo conseguido en Grecia, el Lancha Delfino advirtió que “con el paso del tiempo se valora más la medalla”. “Ojalá podamos meter de nuevo otra bandera en la luna”, se entusiasmó el santafesino, en lo que sería la segunda vez en la historia nacional (quinta a nivel global) que las barras y las estrellas no flameen en la cima del planeta.

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