Sergio Romero se preparaba para su tercera Copa del Mundo de Mayores. Estuvo en Sudáfrica 2010 y en Brasil 2014. En su foja cuenta con un título mundial: el Sub 20, en Canadá 2007.
A pesar de arrastrar poca continuidad en el Manchester United, era fija como titular en el equipo, más allá del buen rendimiento de Franco Armani. Chiquito es un referente del grupo, uno de los integrantes de la camada de juveniles de la era Pekerman-Tocalli, junto a Javier Mascherano, Lionel Messi, Ángel Di María, Lucas Biglia y Sergio Agüero, entre otros.
Por lo tanto, resultaba lógico que fuera una de las figuras determinantes en el ploteo con el que la Asociación del Fútbol Argentino decoró la concentración en el Bronnitsy Training Centre.
Un cartel imponente espera en el exterior del complejo a la Selección. En el mismo, Romero es la figura excluyente, incluso, más grande que Messi. Más allá de que tal vez deba realizarse una artroscopía y aún no sabe si podrá acompañar físicamente a la Selección en la aventura en Rusia, Romero dirá presente, desde el reconocimiento en el cartel.
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