"¿Y a ustedes qué grupo les tocó?", fue la primera pregunta del chofer peruano que nos transportó desde el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez hasta nuestro hotel, al enterarse de que sus pasajeros eran periodistas. "Nosotros la tenemos bien difícil con Francia, Dinamarca y Australia", se lamentó. Perú se clasificó nuevamente para el Mundial de fútbol luego de 36 años.
"Sí, el Dakar ya se siente aquí", aseguró mientras una camioneta de la competencia circulaba entre el caótico tráfico de la ciudad de Lima, el cual resulta insoportable entre bocinas y gritos a partir de las 19. El trazado volvió al país incaico después de cinco años de ausencias.
Sumado a las actividades deportivas, también sobresale otro evento mundial sumamente importante, la llegada del papa Francisco a la ciudad a partir del 18 de enero, razón por la que aparece su cara empapelando distintos edificios y comercios. Será la primera vez que Jorge Bergoglio visite al pueblo peruano.
En medio de la euforia que sienten los fanáticos por la clasificación de su país a un nuevo Mundial, también se cuela el orgullo de saber que desde su capital se iniciará una nueva edición de la segunda competencia motora más importante del mundo por detrás de la Fórmula 1.
La base aérea de Las Palmas, en la cual el papa Francisco dará una multitudinaria misa el próximo 21 de enero, actualmente es utilizada como centro exclusivo de la organización previa a la largada. Pilotos, periodistas, mecánicos, todos en un mismo sitio. De un lado, la sala de prensa, en donde se puede oír una gran cantidad de idiomas de distintas partes del mundo. Del otro, la playa de estacionamiento con los vehículos que aún no fueron retirados.
Allí, como un canto de sirena, el Himno Nacional argentino nos llevó hasta la camioneta de Omar Gandara y Leonardo Martínez, piloto y copiloto del Omar Gandara Dakar Team.
"Acá estamos preparándonos para la aventura", fue lo primero que acertó a decir Mayco, el navegante y mecánico de la Toyota 4×4 essence.
—¿Cómo está el auto a tan poco tiempo del inicio?
—Estamos por estrenarlo, es un prototipo nuevo, hecho totalmente en Mar del Plata, Argentina, así que vamos a ver cómo nos va. Siempre pasa algo a último momento, ahora estamos con los gatos hidráulicos que no nos funcionan, pero lo demás está todo correcto.
—¿Cómo están ustedes de cara a la competencia?
—El piloto (Omar Gándara) ya es el sexto Dakar que correrá. Yo estoy debutando… Por ahora estoy tranquilo, el sábado te cuento. Vamos a salir del Pentagonito y de ahí vamos a hacer el enlace para el lado de Pisco con un prólogo de 30 kilómetros, y después ya empieza el Dakar de verdad.
El piloto marplatense de 63 años participará con el dorsal número 371 y volverá a la competencia después de su ausencia en 2016. "Queremos terminar con la racha de abandonos", aseguró el argentino, quien a lo largo de sus seis participaciones solo pudo terminar la competencia en 2011, obteniendo el puesto número 53 en la categoría autos.
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