La cicatriz que dejó la derrota con Brasil todavía no se cerró; y puede que pasen años para que sanen las heridas. A la espera del partido por el tercer puesto, ese que nadie quiere jugar y que solo es celebrado en los Juegos Olímpicos, la Selección vive tiempos de análisis para afrontar un futuro con miras a la próxima Copa América, las Eliminatorias y el Mundial de Qatar.
Sin ninguna oficialización sobre la continuidad de Lionel Scaloni, quien en principio seguirá en el cargo hasta diciembre (puede que se extienda el vínculo), Oscar Ruggeri reveló una intimidad que vivió con Ricardo Gareca cuando en la AFA estaba el cargo de entrenador vacante.
"Estuve un mes en la casa del Flaco, yo le decía que espere que lo iban a llamar de Argentina. Los peruanos lo llamaban todos los días para que renueve y yo le pedía que les pida una semana para renovar, hasta que un día puso una fecha para dar su respuesta", deslizó el ex defensor en el programa 90 Minutos de Fox Sports.
En el diálogo que mantuvo con Sebastián Vignolo, conductor del ciclo, el Cabezón continuó con la anécdota que mantuvo con el técnico que jugará la final del torneo continental frente al anfitrión: "Gareca esperó a la Selección. Él estaba libre, porque estaba sin contrato. Imaginate si hubiese estado ahí cuando pasó el escándalo con Brasil".
El cierre de la infidencia concluyó con su habitual estilo, asegurando que le encantaría tener el puesto que hoy ocupa César Luis Menotti, quien se quedó en Buenos Aires por algunos inconvenientes de salud y no acompañó a la delegación albiceleste a sus compromisos en el país vecino. "A mí me hubieran metido preso. Si el Flaco era el técnico y yo el mánager, yo hubiera terminado preso. No sé en dónde, pero hubiera terminado detenido. Hubiese saltado a la cancha para abrazar al árbitro y no dejarlo dirigir".
"La bronca nos va a durar mucho tiempo. Lo vamos a recordar como un hecho insólito. No entiendo cómo lograron hacer eso. Hubo alguien que lo organizó. No fue un córner, ni siquiera es para discutir las jugadas. Fue muy alevoso", concluyó.
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