El partido estaba complicado para Argentina en el inicio del complemento cuando un inesperado penal a instancias del VAR le dio la incomparable ocasión de empatar esa segunda fecha del Grupo B contra Paraguay.
Lionel Messi tomó la responsabilidad de ejecutar el disparo desde los 12 pasos y cruzó el lanzamiento para nivelar el marcador. Rápidamente tomó la pelota para reiniciar el partido, pero antes llevó a cabo una celebración particular.
Se realizó la habitual señal de la cruz y luego unió sus manos para formar un corazón mientras mostraba el gesto a la cámara. Acto seguido, besó la palma de su mano y cerró el puño antes de retomar su sitio habitual en el campo de juego.
El interrogante en torno a quién iba dirigido el festejo se planteó pero en las redes sociales se develó rápidamente: su esposa, Antonela Roccuzzo, subió un mensaje para agradecerle el gesto al capitán.
"Te amo", escribió Anto en las redes sociales y el posteo rápidamente traspasó las 800 mil interacciones y recibió miles de comentarios, varios de ellos de personalidades famosas.
Cabe destacar que fueron contadas las veces en las que Leo modificó su habitual celebración con los brazos al cielo –una dedicatoria para su abuela– para llevar a cabo un festejo personalizado. Cada vez que lo cambia, despierta el interés de propios y ajenos para conocer al destinatario de este mensaje.
Tras el encuentro, que culminó 1-1 y puso en aprietos al equipo argentino en la Copa América, el deportista rosarino tomó la palabra ante los medios y dejó algunas percepciones sobre el penal: "En el penal fui convencido, con esta nueva ley de los arqueros, que no se pueden adelantar y tienen que pisar la línea, se hace muy difícil para ellos, y a los que pateamos nos favorece".
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