La Conmebol ya definió las probables fechas para los encuentros de la Copa Libertadores, que serían para el 15 de septiembre, aunque los elencos argentinos luego fueron autorizados para comenzar su participación en el certamen internacional dos días después. A partir de ello, desde la Asociación del Fútbol Argentino y el Ministerio de Salud avanzaron en la confección del protocolo para la vuelta de los entrenamientos y se especuló como posible regreso los primeros días de agosto. Es por eso que los clubes comenzaron a definir los regresos de los futbolistas extranjeros que están fuera del país y que una vez arribados al país deberán cumplir con los 14 días de aislamiento. De esta manera, no tendrán problemas para entrenarse cuando se confirme la vuelta a las prácticas.
River es uno de los tantos clubes que tienen futbolistas en el extranjero y espera recibirlos a partir de esta semana. Sin embargo, Marcelo Gallardo ya recibió la primera mala noticia en relación a Juan Fernando Quintero. El colombiano, quien había viajado a su país el 19 de mayo, tenía como fecha de regreso al país este lunes, pero ya fue notificado el club de que el jugador recién lo hará el jueves debido a unos problemas en los permisos de vuelo. Pese a ello, se estima que aún cuenta con margen de tiempo, debido a que las cifras de infectados y muertos por el coronavirus en el AMBA hace suponer a las autoridades sanitarias en un posible retraso a la fecha que se habían planteado en un principio.
Juanfer iba a ser el quinto futbolista extranjero luego de que se confirmaran los regresos del uruguayo Nicolás De La Cruz el viernes (vía ferry), los colombianos Rafael Santos Borré y Jorge Carrascal y el chileno Paulo Díaz, quienes lo hicieron el sábado a través de vuelos humanitarios. En tanto, el miércoles se espera que lo haga el paraguayo Robert Rojas, luego de su fallido intento de abordar un vuelo de repatriación.
El técnico Marcelo Gallardo pretendía tener a todo el plantel listo para los primeros días de agosto por si finalmente se autorizan los entrenamientos y deben empezar con los protocolos para trabajar al menos seis semanas, tal como le pidieron a la AFA y a la Conmebol, antes de retomar la competencia en la Copa Libertadores. Sin embargo, Quintero y Rojas ya no podrán cumplir con la idea del Muñeco.
Los planes de Gallardo para los entrenamientos es sumar chicos de la reserva para tener más alternativas, porque supone que habrá lesiones y una readaptación que necesitaría mucho tiempo, lo que generaría una inevitable rotación. Lo que no se decidió todavía es el lugar de los entrenamientos, que pueden ser en el Monumental, en el predio de Ezeiza o, eventualmente existe la idea de diseñar una “burbuja” sanitaria, tal como sucedió en la Major League Soccer estadounidense, para lo cual ya existió una invitación de Mar del Plata.
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