River, al igual que todos los clubes argentinos, analiza uno a uno los contratos que se vencerán el mes próximo. Uno de ellos es el de Iván Rossi, aunque existe una gran diferencia con el resto: el futbolista no será tenido en cuenta por Marcelo Gallardo. El mediocampista de 26 años es el único jugador “colgado” por el Muñeco en el plantel actual del Millonario.
Surgido de las inferiores de Banfield, fue el propio Marcelo Gallardo quien lo apuntó y lo pidió como refuerzo. Sin embargo, aunque tenía mucha confianza en su juego, la estadía de Rossi no salió según lo planeado y tras jugar pocos encuentros fue dado a préstamo a Huracán y luego a Colo Colo de Chile.
Regresó y con el contrato pronto a culminar, analiza si aceptar la oferta de la dirigencia de River por renovar por un año más o quedarse con el pase en su poder, en un contexto muy difícil y de incertidumbre para todos los futbolistas por la pandemia de coronavirus que suspendió la mayoría de las ligas del mundo.
“Es todo confuso y no sé qué va a pasar con el fútbol, no sabés qué es lo mejor para uno, pero mientras esté Marcelo tengo claro que, aunque él me llevó en su momento, las cosas cambiaron y ahora no me tiene en cuenta. Eso está en la cabeza e influye en pensar dos veces si conviene renovar o no. Obviamente saco lo que significa jugar en River o estar ahí con contrato, es algo perfecto, pero también es importante para un futbolista jugar”, reconoció el Gringo.
Iván Rossi hizo una profunda autocrítica y valoró las enseñanzas que le dio Gallardo y que él no supo aprovechar: “Obviamente que me hubiese encantado jugar mucho más en River, pero no se dio. Igual le estoy agradecido a Marcelo porque me enseñó muchas cosas. Yo sé separar y aunque no me haya hecho jugar mucho le agradezco”.
El mediocampista detalló qué fue puntualmente lo que le marcó el Muñeco que él no aplicó en su carrera. “Él lo que más me recalcaba era que no demostraba en los entrenamientos las ganas que tenía de jugar. En algunas charlas me decía que era de los mejores 5 que tuvo en un plantel dirigiendo, pero que a la hora de entrenar no le demostraba. Ahora con los años me doy cuenta que tal vez en Banfield a mí me alcanzaba para entrenar a media máquina y jugar los domingos y rendir. En River fue un paso muy rápido el que di y me cayó la ficha, ahora que lo ves de afuera decís cómo no aproveché la oportunidad”.
“Si volviera el tiempo atrás obviamente mostraría otra intensidad en las prácticas, pero no se puede. Hoy uno dice qué boludo cómo no aproveché esas situaciones, o cuando me hablaban Maidana, con quien concentraba, o Leo Ponzio. Pero cuando sos chico hay algunas cosas que podés captar y otras no. Ahora me arrepiento, pero tampoco me puedo machacar de eso”, cerró en diálogo con La Oral Deportiva por Radio Rivadavia.
Seguí leyendo: