Los motivos de la pelea con Gallardo que lo obligaron a irse de River y el polémico 0-0 con el Boca de Coco Basile: las confesiones de Mostaza Merlo

Reinaldo Merlo dio importantes revelaciones sobre dos hechos trascendentales en su etapa como entrenador de River. Mostaza fue consultado por los motivos que lo llevaron a presentar su renuncia como DT del Millonario en 2006, lo que fue su segundo ciclo al frente del club de sus amores (la primera había sido en la temporada 89/90). “Me lo voy a llevar a la tumba”, afirmó.

A mediados de 2019, Merlo reconoció que la situación más tensa que vivió en un vestuario fue la vivida con Marcelo Gallardo en el equipo. “¿La más jodida que pasé? La última de River, en 2006”, aceptó Merlo en los estudios de TyC Sports.

¿Qué sucedió en aquella ocasión? Mostaza transitaba su segunda etapa como entrenador del club de Núñez. El equipo había perdido en los amistosos contra Independiente y San Lorenzo. Gallardo no se sentía cómodo con sus posibilidades de sumar minutos y con la forma de jugar con el equipo. En consecuencia, le anunció a Merlo que en esas condiciones prefería buscar otro destino. Mostaza lo tomó como un desafío a su autoridad y decidió renunciar. “Yo nací aquí y quiero a River más que muchos de ustedes”, dijo en la conferencia de prensa en la que anunció su despedida en el Hotel Primacy, de la Ciudad Feliz.

Este martes, en una entrevista con TNT Sports, Mostaza volvió a ser consultado sobre este incidente. Si bien repitió que los motivos se los llevará a la tumba, reveló: “No voy a entrar en tema profundo, pero no fue un problema táctico ni de entrenamiento, fue otro problema pero yo me lo voy a llevar a la tumba a eso”.

Sobre si esta situación es similar a la de Coco Basile, quien declara de forma similar cuando explica su renuncia de la Selección, dijo: “Es algo que me lo llevo para mí y no lo sabe nadie. Y sí son más o menos los mismos códigos, los jugadores la mayoría tienen los mismos códigos. Respeto a los que quieran contar algo, no tengo ningún problema”.

Y aclaró que no le guarda rencor al Muñeco: “No le guardo rencor. Me he cruzado con Gallardo en una fiesta y nos saludamos bien. Me encanta que le vaya bien y que hoy sea uno de los mejores técnicos de la Argentina. Le deseo lo mejor porque uno nació en River y terminé mi carrera ahí. Cuando River gana un título me pongo muy contento”.

Merlo también se refirió a otro de los hechos que generaron polémica en su carrera como entrenador y fue el famoso Superclásico que lo enfrentó con su amigo Coco Basile. Ese encuentro por el Apertura 2005 terminó 0-0 y desató un sinfín de rumores sobre un supuesto pacto de no agresión. Merlo desestimó por completo esta versión y contó cómo vivieron los días previos a ese cruce.

“Esa semana, yo dejé de ir a comer a La Raya que iba siempre los lunes y miércoles. Él (por Basile) tampoco. Además, siempre nos encontrábamos en un bar a tomar algo, y tampoco fuimos. Hasta que llegó el partido y bueno, terminó 0-0. Fue un partido horrible, malo y respeté la opinión de todos, pero nada que ver. Yo me pude haber equivocado armando equipos, poniendo o sacando jugadores, pero puedo irle de frente a todos. Nunca estuve en nada raro, ni como jugador, ni entrenador, ni nada, y mirá que me han ofrecido un montón de cosas y a todo le he dicho que no”, cerró.

Otras frases destacadas de Mostaza Merlo:

“A Ramón Díaz lo quiero. Lo tuve compañero y fue un jugador fenomenal. Siempre lo quiero de mi lado. Tenía quinta velocidad, entraba y nos ganaba los partidos”.

“Como DT de Racing no le grité a River el gol de Bedoya. Entré para decirle a Úbeda que aguantara que el empate nos servía. Esa semana no dormí, River venía de atrás y me levantaba a las 4 pensando cómo lo tomo a Ortega, D’Alessandro y Cardetti. Ese River era una Selección, tenía a Coudet, Ledesma, Cambiasso y Zapata, más la línea de tres con Garcé, Ayala y Yepes. Seguimos con cinco puntos de ventaja y a tres fechas para el final. Fue el 70 por ciento del título. Le jugamos un buen segundo tiempo, con garra y temperamento. Racing tenía mucho carácter”.

“Yo no renuncié nunca a dirigir, me encanta estar en campo con los jugadores. Si me contratan obviamente que me gustaría. Obviamente que es muy difícil porque los dirigentes buscan a los entrenadores jóvenes, como lo fui yo en un momento”.

"Más allá de que estoy muy identificado con River y con Racing, la gente de todos los equipos me saluda y me brindan afecto. Creo que es porque siempre tuve una manera de manejarme".

"Los primeros seis meses en Racing fueron difíciles, en los que tuvimos que sacar puntos para zafar de la promoción. Después armamos un equipo con dos compras, algunos préstamos y todos chicos del Club con el que fuimos campeones".

"En el año '76 tuve ofertas de Zaragoza y del Sportign Gijón, pero a mí no me entusiasmaba irme de River. Obviamente que hoy se manejarían otros valores. Después, en el '75 me querían Independiente y Estudiantes y Labruna me pidió que me quedara en el Club. Estoy contento de haber hecho toda mi carrera en River, es un orgullo tremendo".

“En un momento al Club lo manejaba Lacoste y por eso se fueron Labruna, Beto Alonso y J.J. López. Una vez, Fillol dijo que quería ganar una plata y Lacoste lo llamó para decirle que no podía pedir eso, pero él se puso firme”.

"En mi primer ciclo como DT de River me terminé yendo porque le había dado la palabra a Di Carlo que si él no ganaba me iba y así fue. El campeón en aquel momento fue Passarella, no me siento parte, porque dirigí la primera rueda y él dirigió la segunda. El campeón es el que termina sentado en el banco".

"Conmigo Gabriel Batistuta jugaba por la derecha, cuando estaba por venir a River lo fui a ver y lo vi metiendo diagonales desde ese lugar. A mí me rendía por ahí, pero después no pregunté nunca nada de porqué no jugó más en el club".

"Mi segundo paso como entrenador no fue malo, yo llegué y el equipo ya estaba armado. Traté de corregir cosas, pero perdimos sobre la hora en la Copa Libertadores contra Corinthians. Después de eso decidí subir a Falcao a la primera y nos armamos con Marcelo Gallardo de enganche. Quisimos luchar el título pero no llegamos".

"El el partido del Monumental, le dije a Bedoya que pateara fuerte porque el arquero era Demichelis. Pero ellos decidieron hacer la jugada y después la agarró Cuevas que fue imparable. Yo siempre defiendo que el jugador, si se tiene fe, patee".

"El Racing de Diego Cocca tuvo un muy bien equipo y un Milito brillante, que vino con toda la experiencia de Europa. Con él en cancha todos alrededor se sentían seguros. Fue un líder dentro del campo que aportó claridad".

"Desde que arrancó el torneo del 2001 el objetivo era ser campeón y todo lo que pasó alrededor fue difícil. Me acuerdo que pudieron hablar con Ramón Puerta y con Julio Grondona para que al menos jugaran Racing y River. Nos encontramos a la 1 de la mañana en el hotel para concentrar en navidad porque jugábamos el 27 diciembre".

"Yo a Diego Milito lo tuve de chico y ya era un jugador bárbaro. Tenía técnica, gol y sabía tirarse atrás, cuando tenía algunas situaciones que no podía convertir yo le decía 'tranquilo que ya van a entrar'. Su crecimiento en Europa fue impresionante".

“Lautaro Martínez es un fenómeno. Es un goleador, ganador, va a todas, aguanta y gira muy bien. Si pasa al Barcelona va a ser muy importante. Si se puede juntar con Lionel Messi y Suárez pueden ser cosa seria”.

“La última vez que Racing me llamó no podía decirle que no. Sabía que el equipo estaba complicado y pudimos sacarlo de esa zona difícil después del partido que le ganamos a Vélez. Una vez pasado eso el Presidente del Club, con quien tengo gran relación, decidió otro proyecto”.

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