La Copa Libertadores de 1996 que lo tuvo al River Plate dirigido por Ramón Díaz como campeón fue el certamen consagratorio de Hernán Crespo que lo catapultó al fútbol europeo y donde, a partir de allí, forjó una majestuosa carrera de 16 años en la elite. En aquel torneo en que el Valdanito se despachó con diez goles, dos de ellos en la final ante el América de Cali, el Millonario protagonizó un legendario choque ante San Lorenzo, por los cuartos de final.
Fue así que, casi 24 años después, el actual entrenador de Defensa y Justicia rememoró aquel enfrentamiento con el Ciclón junto con Oscar Ruggeri, entonces defensor de aquel conjunto dirigido por Héctor Veira, y juntos mantuvieron un cruce televisivo.
Quien actuó como mediador fue el conductor Sebastián Vignolo en el programa 90 Minutos, de Fox Sports, que encendió la mecha al deslizarle al cabezón su bronca con aquel equipo del Millonario luego de quedar eliminados. “No, con todos me hablé al final. Menos con el arquero, pero los demás con todos. Con el arquero el único, ja. ¿Hernán, vos no tuviste problemas con el arquero?”, contestó el campeón del mundo de 1986, asegurando que solo mantiene diferencias hasta el día de hoy con quien custodió el arco del equipo de Núñez en aquella llave, Germán Burgos.
“No, yo no tuve problemas con nadie. ¿Sabés qué pasa, Oscar? Que siendo 9, con los centrales no podés ser enemigo porque estás siempre de espalda, ja”, respondió Crespo a su interlocutor para bajarle la temperatura a la charla.
Fue allí que el ex zaguero de 58 años reconoció que la discusión ya había quedado atrás y hasta reveló una indicación que le había dado su DT en esos encuentros ante River: “El Bambino me gritaba ‘no le pegués que es un modelo’. Pero que no le voy a pegar si después me hacía el gol y me sacaban. Está todo bien, vamos todo bien. Como dijo Diego un día: estamos viejos. Ya está”.
Mientras el ex goleador y el panelista mantenían una charla amena, desde la producción decidieron poner al aire el tanto que convirtió Crespo en el duelo disputado en el Monumental, lo que provocó la reacción de Ruggeri. “A Manusovich le cabeceó. Ojo que en esa eliminatoria entre River y San Lorenzo, estuvimos ahí, eh. Me erré un gol. Un cabezazo al lado del palo que creí que me iba a pegar una piña Burgos y cabeceé medio de costado, sino lo empatábamos ahí e íbamos al alargue. Serie complicada, eh”, deslizó.
“Pollo, por qué no ponen el que está Oscar, el gol de la ida”, retrucó rápido el entrenador de 44 años a modo de chicana. “No seas hijo de puta, ja. Lo corrí yo y le pegó por arriba. Terrible gol. Le metí (un manotazo) en el pecho pero no lo pude parar. No lo bajé porque me echaban, le metí la mano pero qué hijo de puta, qué rápido era. Esto fue en cancha de San Lorenzo, el primer partido. Me desacomodó...”, continuó Ruggeri, que lejos de molestarse entendió el clima de la conversación.
Todo terminó con un planteó del Cabezón que hizo estallar de risa al resto de los presentes: “Pero también pongan los dos goles míos pelotudos, que me ponen lo de los rivales. ¿Y yo? que hice los dos goles”.
La serie disputada entre el 15 y el 22 de mayo de 1996 iba a terminar a favor de River por 3-2 en el resultado global. La Banda avanzó a las semis, en las que superó a Universidad de Chile, también por 3-2, y luego se quedó con el trofeo al imponerse por 2-1 ante el elenco colombiano. De esa manera, la institución sumó su segunda Copa Libertadores.
Seguí leyendo: