Guillermo Coppola fue entrevistado de manera virtual por Pablo Giralt para TNT Sports y dejó desopilantes anécdotas. En esta segunda entrega, en la primera contó el día que Diego desairó a Luis Miguel y cuando dejó pagando al Milan, el ex manager de Maradona contó cuáles fueron los famosos que durmieron en su habitación y por qué, entre ellos Luis Miguel, Ricky Martin y Alejandro Sanz. Además, revivió su “historia de amor” con Sophia Loren y la de Pelusa con Rafaella Carra, entre otras desopilantes anécdotas. También recordó el día que casi se cancela el homenaje a Diego Maradona en la Bombonera por un insólito enojo del Diez.
Los famosos y líderes políticos que conoció y la historia de amor con Sophia Loren
“Conocimos a Enzo Ferrari, a los líderes políticos como Fidel Castro o Khadafi (Muamar el Gadafi), el Rey Juan Carlos, Carlos de Inglaterra: ‘Decile a este narigón que me saque la noma del hombro’, me decía Diego ¡sobre el Rey Carlos de Inglaterra! Cosas así de Diego que te descolocaban. Elton John, la manopla de Elton John que venía subiendo y él se reía, así se motivaba”.
“Sophia Loren. En Napoli la invito al palco, era un sueño que tenía que vivirlo. Viene a la tribuna de honor del San Paolo y vamos a cenar con Claudia y Diego jugando a favor para que yo cumpla ese sueño. Todo venía bárbaro. Cuando nos vamos, en la Ferrari, sube Sophia con un trajecito gris ¡unas piernas! y me dice: ‘A dónde vamos, al hotel de Nápoli’. Yo iba subiendo la temperatura, no lo podía creer. Bajo del auto, le abro la puerta, dejo la llave de la Ferrari y vamos a la recepción. Le dan la llave y yo atriqui iba perfecto a jugar el partido de la vida, y ella al pie del ascensor me dice: ‘Guillermo, gracias. Usted es un hombre fascinante, pero yo estoy enamorada de mi marido’. La llevé, le abrí la puerta del ascensor y chau. Estuve ahí, pero...”.
Anécdota de Diego Maradona con Raffaella Carra
“Una historia total. Diego no volvía a Italia desde hacía una pila de años. Arreglamos con la RAI donde ella tenía su programa, el más visto de la TV y que iba para todo el mundo. Nos contratan, buen dinero, mejor hotel, todo preparado. Me dice Diego, hora antes de ir: ‘Guille nos preparamos, donde es el sauna’. Le averiguo y no tenía el hotel porque era viejo. No tenía sauna. ‘¡No voy!’, me dice. ‘Pero cómo vas a ir, Diego es una locura qué me estás diciendo’”.
“La plaza de Napoli con pantalla gigante, toda la sorpresa que iba a tener él en ese programa. Bueno, perfecto. Había que jugar y yo el timming lo tenía. El productor estaba como loco con que la señora Raffaella está preocupada y Diego viendo el Bayer Leverkusen sin importarle nada. Claudia me preguntaba qué iba a pasar. Voy y le digo a Diego que hay 10 mil personas en una plaza de Nápoli, más algunas sorpresas y la guita que nos depositaron que vamos a tener que devolver, todo porque no hay un sauna. ‘Y bueno, vos sabés lo que me gusta’, me decía. Mirá cómo te puse el baño, le digo, Claro le puse tanto vapor que era el mejo sauna de Roma, un fenómeno. Se afeitó y salimos”.
“Todo Nápoli viendo el programa, Diego lloraba, un programa bárbaro. Nos vamos de ahí a la casa de Raffaella que nos invita a comer. Raffaella una chica grande ya, pero viste esa fantasía que te agarra. Bueno, qué hacemos, buenos vamos a travesuriar. Entonces, para tener un poco de intimidad, le digo al marido de Raffaella que estaba en la casa, un coreógrafo recontra conocido en el mundo, que prepare un café. Yo fui a hacerle la segunda, la cobertura, y el tipo un vivo me dijo ‘dejá, me pedis el café para que yo me quede acá. Te hago el café, lo bebés y dejala que vaya tranquila’. Historias de ese tipo teníamos con Diego para travesuriar”.
Ricky Martín, Alejandro Sanz y Luis Miguel durmieron en su habitación
“Ricky Martin durmió en esta casa, en esta habitación, en otra cama por supuesto. Teníamos un espejo en el comedor que de un lado se veía y del otro no, y travesuriábamos. Lo único que no podías hacer era fumar, porque se veía. Este lugar lo perdí en un momento cuando se remató, pero gracias a los amigos lo volvimos a comprar”.
“Ricky Martin un chico bárbaro. Dalmita (hija de Diego) era fan y él fue a cenar a la casa de Diego en Segurola y La Habana. Hizo un asado el suegro Coco y Ricky contento. Había una relación porque Ricky tenía un muy amigo aquí en Argentina. Hoy ya no está más, un chico bárbaro, gran conductor. Una mañana me llaman temprano porque había llegado Ricky de sorpresa a visitar al amigo. Pegado a un colegio de señoritas lo ven ingresar. Imaginate, a la media hora, chicas frente a la puerta clamando por Ricky. Me llama este amigo, conductor, y me dice: ‘Guille salvanos, estamos en esta situación’. Barrio de Once, recuerdo que el auto lo subí a la vereda, pegado a la puerta del departamento de este querido amigo que ya no está. Lo rescaté y lo traje acá a casa, y ahí se quedaron. Había que cuidarlo, en esa época no se supo su condición sexual, por eso lo digo ahora que se sabe”.
"Alejandro Sanz también lo conozco y se da una corriente de simpatía con él una noche en un restaurante del barrio de San Telmo. Había chicas amigas de Alejandro Sanz, hace muchos años no era el Alejandro Sanz con la popularidad y trascendencia que después tuvo. Una de las chicas lo conoció, estudiaba canto y era amiga mía. Me preguntó si tenía una guitarra, le dije que sí, pero mentira no la tenía. Vamos para casa, y bueno la guitarra nunca apareció, había que ayudarlo. Con Alejandro nació esta corriente de amistad que después se hizo que en dos viajes posteriores viniera a alojarse acá a casa. Amante del fútbol, vino a conocer la Bombonera como Ricky Martin y Luis Miguel".
El insólito enojo de Diego Maradona a horas de su homenaje
“Él era así, el día el partido homenaje, que no fue despedida porque Diego no quería que digan despedida, estaba haciendo una nota para el canal que transmitía el evento. Arreglamos la transmisión del programa previo en la cancha, en el hotel. Gente de todos lados, invitados, Diego contento y feliz. De repente, él pide un corte. Todos nos asombramos. Se corta la transmisión y me dice: ‘No juego ningún partido’. Estaban Pelé, Platini, el mundo del fútbol ahí. ‘¿Qué te pasa Diego?’, le digo. ‘Vos me dijiste que la cancha iba a estar llena y está vacía’, me dice. 'Sí, Diego. Tenés razón, está vacía porque no abrieron la puerta, por eso está vacía. No había un lugar para ver ese partido”.
La huelga, el conflicto con Boca y el trueque con River: Gareca y Ruggeri por Olarticoechea y Tapia
“Eso fue en Martín García, año 80 y algo. Conflicto en Boca y yo representando a todo Boca, a todo el plantel. Me quedó una marca después de eso. Gareca y Ruggeri se van a River y el Vasco Olarticoechea y Tapia llegan a Boca. Muchos sintieron que podía ser una traición que me llevara a dos jugadores que nacieron en Boca a River, pero también llevamos dos de River a Boca. Era una necesidad, no era por un beneficio económico personal, para nada. Yo laburaba bien en un banco. Boca lo necesitaba, el fútbol estaba parado, en huelga, y gracias a esas transferencias que se hicieron el fútbol pudo continuar. Es un recuerdo imborrable”.
El ansiado reencuentro con Diego Maradona en Rusia durante el Mundial
“Estoy en el palco para ver el partido, de repente me dicen que acababa de pasar Diego. Salgo, no digo nada. Hace años que no lo veo y lo voy a saludar, sabiendo qué podía pasar cualquier cosa. A Diego no lo veía desde el velatorio del papá, el entierro. Sabía que podía tener una chance, con Diego nunca sabés. Pero cuando Don Diego falleció, yo venía de ser su manager, amigo, hermano, el hombre que le salvó la vida, y un día fui el hombre que le robó la plata de sus hijas. Ese es el Diego que yo conocí. Él día del velorio que me llama me dice: ‘Don Diego te adoraba, ¿no vas a venir?’. Por supuesto fui, y el día del entierro, ante cientos de personas, pega un grito y me da la manija del cajón de su papá para que lo lleve. Si le robás la plata de las hijas no le das la manija del cajón de tu papá".
“Esto lo tenía presente y fui a su encuentro en Rusia, no tenía el partido asegurado. Abro la puerta, él está de frente mío y de espalda al campo. Habían pasado muchos años. Fue un abrazo, mucho llanto y recuerdos. Fue increíble, un lindo encuentro. Hubo dos frases: ‘nunca dejé de amarte’ y 'yo tampoco’. Llanto y todo lo demás es nada. Nunca hasta hoy dijo que lo de las hijas no fue así, pero sí tuvo actitudes, como lo del cajón, lo que pasó en Rusia o lo que vivimos en cancha de Quilmes con Gimnasia por la Copa Argentina. Aquél día nos abrazamos y recordamos historias. Vivimos una vida”.
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