El detalle pasó inadvertido en la victoria de Talleres 3-0 ante Huracán en Parque Patricios, por la primera fecha de la Copa de la Superliga, hubo un cambio de juez asistente. En lugar de Pablo González, en el equipo de autoridades que comandó Patricio Loustau apareció Eduardo Lucero. Cerca de las 21, instantes después de que Alberto Fernández anunciara nuevas medidas restrictivas para frenar el avance del coronavirus (que en el país acumula 56 afectados y dos muertos), la Dirección Nacional de Árbitros anunció internamente una nueva modificación: Nicolás Lamolina, juez designado para Lanús-Argentinos Juniors, fue reemplazado por Hernán Mastrángelo (que aparecía como cuarto en el encuentro).
¿Qué sucedió? Ambos fueron parte del elenco de jueces que estuvo al frente del cruce entre Flamengo y Barcelona de Ecuador del último miércoles en Río de Janeiro, por la Copa Libertadores (ganó el conjunto brasileño por 3 a 0), junto a Facundo Tello y Julio Fernández. Y hace 48 horas se confirmó que Mauricio Gomes de Mattos, vicepresidente del Fla, dio positivo el test de COVID-19. El directivo había viajado a España, junto con una comitiva de la institución, para reunirse con Florentino Pérez, titular de Real Madrid. Y allí contrajo coronavirus.
En consecuencia, quienes se encargan de las designaciones en la AFA tomaron la determinación de reemplazar a quienes tuvieron contacto con la delegación del Flamengo como medida de precaución (ninguno de ellos presentan síntomas). Apenas se enteraron de la situación que sufre Gomes de Mattos, le informaron a Federico Beligoy (director) y a su equipo de trabajo. Y se dieron las dos modificaciones (Tello y Fernández no habían sido nominados en el inicio del certamen de élite).
Entre las medidas anunciadas, el presidente de la Nación apuntó que "no se va a poder desarrollar ningún tipo de espectáculo, ningún tipo de teatros, cine, espectáculos deportivos, espectáculos musicales que signifiquen un nucleamiento de gente, un número importante de gente que se nuclee en esos encuentros, tratando de evitar que en la multitud el virus se disemine”. Sin embargo, exceptuó al fútbol, dado que “se juega a puertas cerradas, no habría inconvenientes. Me encantaría que en este tiempo le den a los argentinos la posibilidad de verlo no por sistema codificado, sino por TV abierta. Ya que nos vamos a quedar en casa, para nosotros es un divertimento ver los partidos de fútbol”.
Instantes después, la Asociación del Fútbol Argentino anunció la suspensión de “todas las categorías de fútbol infantil y juvenil hasta el 31 de marzo”. Sin embargo, oficializó que “el resto de las categorías continuarán disputándose, sin público, tal lo informado días atrás y en sintonía con las medidas dispuestas por los organismos de salud nacional y según lo expuesto hoy por el Poder Ejecutivo Nacional”.
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