Arquitecto e hincha de Boca: quién es Agustín García Puga, el nuevo encargado de la seguridad en el fútbol

Reportará directamente a un antiguo jefe de esa dependencia: Eduardo Villalba. Especialista en estadios (trabajó en la construcción de la nueva casa de Estudiantes de La Plata), el elegido deberá lidiar con el intento de los líderes de las barras de desactivar el derecho de admisión

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García Puga, en la Bombonera,
García Puga, en la Bombonera, donde es habitué

Si la seguridad en el fútbol necesita reconstruirse desde los cimientos, el nombramiento de un arquitecto para esa tarea podría ser una buena señal. Si en cambio lo que se busca es un experto en operativos de seguridad, la decisión podría ser discutida. Lo cierto es que la ministra de Seguridad, Sabrina Frederic, decidió finalmente confiar en Agustín García Puga como nuevo titular de la Dirección de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos, quien reportará directamente a un antiguo jefe de esa dependencia: Eduardo Villalba, quien manejó la crisis de los barrabravas desde 2013 en adelante después de que fracasaran las medidas menos gravosas impulsadas por la ex ministra del área, Nilda Garré, y asumiera el control el secretario de Seguridad, Sergio Berni, ahora flamante ministro de la Provincia de Buenos Aires.

La elección de García Puga, arquitecto especialista en estadios (trabajó por ejemplo en la construcción de la nueva casa de Estudiantes de La Plata) tiene su base en que tras el traspaso de los operativos a cada jurisdicción, a la Nación lo que le quedó como materia prima de trabajo es aplicar el derecho de admisión bajo el exitoso programa Tribuna Segura que fue inaugurado por el saliente titular del área, Guillermo Madero, quien ahora cumplirá la misma función en la Ciudad de Buenos Aires, bajo el mando del vicejefe Diego Santilli, reemplazando en el cargo a Valeria Sikorski, quien en enero de 2019 se había convertido en la primera mujer en un máximo cargo estatal en violencia en el fútbol.

García Puga, hincha fanático de Boca, tiene vasta experiencia en un área determinada. Fue responsable de infraestructura de estadios en Provincia de Buenos Aires desde el 2000 al 2002 y en 2003 pasó a tener el mismo cargo en Nación hasta febrero de 2011, cuando Aníbal Fernández perdió poder en el gabinete, Nilda Garré pasó a tener control de todos los estamentos de seguridad y nombró en Deportes a Juan Carlos Blanco, quien renovó todo el equipo hasta que fue cesado en 2013. Ahí asumió Sergio Berni y entre sus colaboradores estaba Eduardo Villalba, quien fue designado jefe de seguridad deportiva cargo que mantuvo hasta el final de la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. Villalba es ahora secretario de Seguridad de la Nación.

La mayor objeción contra quien hoy es uno de los hombres fuertes del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo tiene que ver con la falta de relación en los operativos en la cancha, pero se repite, eso ya es función de cada jurisdicción. Y si bien desde el ministerio se le aseguró a Infobae que el programa Tribuna Segura seguirá adelante sin modificaciones, García Puga tendrá que lidiar con un tema sensible: el intento de los capos de las barras de Boca y River de volver a los estadios aduciendo que el derecho de admisión vigente es anticonstitucional, porque llevan más de 36 meses en esa situación. En los últimos meses, algunos barras como Maximiliano Mazzaro, ex líder de La Doce, lograron por vía administrativa que se les retire la prohibición y por ese mismo camino están yendo Rafael Di Zeo, Mauro Martín y Cristian Debaux, tres hombres clave de la barra de Boca. Si ganan la pulseada, el capital simbólico con el que arrancará García Puga se verá menguado rápidamente. Habrá que ver qué sucede. García Puga, además, tuvo un breve interregno como jefe de seguridad deportiva cuando entre julio y noviembre de 2007, Javier Castrilli tomó licencia en el cargo. En ese lapso tuvo que lidiar con el crimen del barra de River, Gonzalo Acro, un hecho que conmocionó a toda la sociedad y lo llevó a suspender un encuentro entre River y Newell’s ante la amenaza de guerra en el Monumental. Hablando de Monumental, García Puga tuvo palabras muy duras cuando se suspendió la final de la Copa Libertadores 2018 por el ataque al micro de Boca.

Zona liberada por la ‘seguridad’ para que barras lesionen a los jugadores de Boca, el capitán de Boca no puede jugar y la FIFA y Conmebol (organismos corruptos con dirigentes presos y procesados) presionando para jugar pese a la ventaja deportiva cueste lo que cueste... Argentina y sus políticos (prendidos en el fútbol también) que avalan desastres y aceptan las presiones comerciales. Hermoso todo” escribió en sus redes sociales. Y minutos más tarde volvió a postear: “Lo relevante del fallo de la CONMEBOL mandando a jugar una final de copa entre equipos Argentinos a 12000 km y con publico de ambas parcialidades, es que pone muy en evidencia que la connivencia entre la política y las fuerzas de seguridad no son capaces ni quieren cambiar su modo de operar. A todo esto se suma otra cuestión que todos conocen... la pésima infraestructura de los estadios que tampoco pueden garantizar una seguridad acorde a la envergadura del evento. Pasan los años... pasan los jugadores... y el sistema se mantiene igual por sobre los intereses de la sociedad”.

Tuvo un breve interregno como
Tuvo un breve interregno como jefe de seguridad deportiva cuando entre julio y noviembre de 2007, Javier Castrilli tomó licencia en el cargo

La novedad del día vino acompañada por otra desde la Provincia de Buenos Aires: la Cámara revocó las prisiones preventivas y domiciliarias para los barra bravas de Independiente que están elevados a juicio en la causa por asociación ilícita, determinando la excarcelación para Pablo Bebote Álvarez, Roberto el Polaco Petrov, Damián Horacio Lagaronne, Italo Romeo y Noray Nakis, lo que podría recalentar una interna de una tribuna que venía siendo pacificada en el último tiempo, aunque el famoso Bebote aún tiene unos meses más de domiciliaria por la condena por la extorsión al ex técnico del club, Ariel Holan. Para lidiar con esta situación Sergio Berni deberá resolver más temprano que tarde quién se hará cargo de la seguridad deportiva. El fin de semana pasado los operativos siguieron al mando de Juan Manuel Lugones, titular del Aprevide, tras una reunión entre el ministro saliente, Cristian Ritondo, y el nuevo, Berni. Este fin de semana se termina la actividad con las ligas regionales y otra vez será Lugones el encargado, aunque el funcionario ya renunció y aún no hay sucesor. Tanto la Superliga como la AFA dieron su plácet para que continúe, y de los clubes de Provincia sus detractores más acérrimos son Banfield, Gimnasia y Esgrima y Almirante Brown. En el resto, Lugones tiene consenso aunque también un problema: llegó al cargo siendo muy crítico de la gestión del kirchnerismo en seguridad en el fútbol y si en un lugar tiene poder el kirchnerismo ahora, justamente es en Provincia. Se verá que sucede porque tampoco falta tanto para la vuelta del fútbol oficial, pactada para el 19 de enero.

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