Argentina avanzó a la siguiente ronda con tres victorias en tres partidos (Corea, Nigeria y Rusia), pero ahora se vendrá una Segunda Fase que será complicada, con duros rivales. El equipo deberá mejorar en algunos aspectos para no sufrir y lograr el pasaje a cuartos de final.
Se está dependiendo mucho de la creación de Facundo Campazzo. Si bien el plantel cuenta con muchas armas en ofensiva, la de Facundo es la principal. En este punto hay que encontrarle una vuelta, porque se vendrán partidos duros ante Venezuela y Polonia y ahora pasará a tener una mayor presión por parte de los rivales.
Él tiene que ser el protagonista, es la gran figura de Argentina. Está en un gran momento y tiene una gran capacidad, pero en algunos momentos hay que quitarle esa responsabilidad. Deben aparecer como variantes Nicolás Laprovittola y Luca Vildoza, o mismo Luis Scola y Gabriel Deck desde el poste bajo.
La defensa está muy bien, con una primera línea que es importantísima gracias al labor de Campazzo y Patricio Garino. Es para destacar que todos asumieron su rol y todos son parte del equipo. Un día aparece Marcos Delía, otro Garino. Luis Scola, obviamente, aparece todos los días. Ya sabemos la clase de jugador que es…
Aunque a Sergio le gusta reducir los planteles y utiliza menos rotaciones, ante Rusia apareció el aporte de Máximo Fjellerup, que contra Nigeria no tuvo minutos. Eso es importante. Todos se sienten parte.
Habrá que seguir trabajando en el rebote. Es importantísimo controlar este aspecto del juego para así contar con más posesiones. Obviamente, no depender tanto de Facu y tener mayores creadores.
Un llamado de atención fue lo que sucedió en el último cuarto ante Rusia. Me preocupa un poco. Una desconexión de esa magnitud se puede pagar muy caro en otro tipo de partidos.
Mañana será el turno de Venezuela, que con Fernando Duró mantiene la filosofía del Che García: posiciones largas, llevando el tiro al último segundo. Alterna muchísimas defensas, sobre todo una 2-2-1 que es complicada de atacar. Son bastante agresivos. Tienen mucha personalidad. Son combativos y luchadores.
Se inclinan por este sistema porque tiene un abanico de baja estatura. Tienen pivotes como Néstor Colmenares y Miguel Ruiz, que son jugadores no muy altos (2.03 y 2.02 metros, respectivamente). Su líder espiritual es Vargas, pero el jugador más picante y en forma es Heissler Guillent. El hombre de los Guaros es muy desequilibrante (promedia 16 puntos, 2.7 rebotes y 7.7 asistencias). También tienen en Jhornan Zamora a un tirador que está en un buen nivel en el torneo.
Polonia, a quien enfrentaremos el próximo domingo, se basa mucho en el pick and roll central, de la mano de A.J. Slaughter y Mateusz Ponitka, que es uno de los mejores anotadores del torneo (17.3 en lo que va del torneo). Gran parte de sus posesiones pasan por sus manos. Los otros jugadores son muy correctos y disciplinados. Son parecidos a Rusia, pero con más talento y jugadores que pueden crear.
Es un equipo grande, duro. Habrá que luchar el rebote ofensivo. Este punto será clave.
En Cuartos podría tocar Serbia, un equipo que está un paso o dos arriba de nosotros. Otra opción es España, que no está tan bien, pero siempre engaña. En los torneos siempre van de menor a mayor. Es un equipo que va a estar a la altura en el día indicado. También está Italia, que es un equipo con mucha calidad individual. Son de temer.
Aunque Italia y España son dos durísimos contrincantes, nos conviene más cruzarnos contra ellos que con Serbia. Son los dos equipos con los que se podría llegar a tener alguna chance. Con Serbia no sé si la tendríamos.
Serbia se posicionó como el mejor equipo. Es el más armado, el más completo. Saben que están para salir campeones. Dieron una muestra de poderío en la muy buena victoria ante italia. Cuentan con un Bogdan Bogdanović (figura de Sacramento Kings) que está en un nivel óptimo en su carrera. Son el gran favorito, el rival a vencer.
La carrera a los Juegos Olímpicos, el otro objetivo de Argentina:
Por suerte, para el básquet americano, casi todos los equipos clasificaron a segunda ronda. Salvo Canadá, que fracasó otra vez. Con tantos jugadores NBA no logró armar un equipo competitivo. Se esperaba más.
Al resto de los países los veo muy bien. Esto es bueno para la región, pero no tanto para Argentina, porque entre todos peleamos por los dos boletos a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Brasil viene de ganarle a un muy duro contrincante como lo es la Grecia de Giannis Antetokounmpo, una de las máximas estrellas de la NBA –fue el último MVP-. También está República Dominicana, que es un equipo difícil, porque tiene al Che García, un entrenador muy capaz de adaptarse a cualquier circunstancia y situación.
Estados Unidos tiene un equipo competitivo. Obviamente no es el mejor que podría haber llevado, pero igualmente es muy competitivo (Kemba Walker, Khris Middleton y Donovan Mitchell, entre otros). Tienen calidad individual entre sus jugadores, más allá de la lesión de Jayson Tatum. No es un gran Estados Unidos, pero estará entre los 8 primeros.
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