Diego Eyharchet puede jactarse de haber visto el prodigio por dentro: trabajó en las piernas de uno de los deportistas más trascendentes de la historia. Fue el encargado, junto a su equipo, de operar a Diego Armando Maradona en su rodilla derecha, en la que le colocó una prótesis especial en una intervención que duró casi dos horas. En diálogo con Infobae, dio detalles de la cirugía, habló sobre el comportamiento del astro durante el proceso y explicó cómo será su rehabilitación y qué actividades, por su salud, pasará a tener vetadas.
-¿Qué fue lo que se le hizo a Maradona?
-Lo que le realizamos a Diego fue un reemplazo de su rodilla derecha. Él llegó a la clínica con una patología llamada Genu Valgo artrósico. Esto es un deseje de la pierna que le trae serios problemas para caminar y, sobre todo, muchos dolores. Una persona normal tiene un deseje de rodilla de unos cinco grados y en el caso de Diego tenía 20. Ese deseje hacía que su cuerpo solo se predispusiera para caerse hacia el lado izquierdo y así el peso de su cuerpo no solo le traía problemas en la derecha, sino que con el tiempo fue rompiendo la izquierda. Diego tenía una rodilla, la derecha, que miraba hacia adentro y por consiguiente la izquierda hacia afuera, esto para que se entienda desde una mirada práctica.
-¿Cómo se hace el reemplazo?
-La cirugía duró exactamente una hora y 40 minutos entre que abrimos y terminamos cerrando la herida. A mí me gusta trabajar con esos tiempos, hacerlo rápido, porque de esa manera disminuimos el riesgo de infección. Lo que hicimos fue colocarle una prótesis norteamericana llamada Triathlon, de la empresa Stryker, que permite recomponer las funciones de la rodilla en su totalidad. Así, si el postoperatorio es bueno y con las recomendaciones médicas; si no hay ninguna infección, que es el principal riesgo, dentro de entre 30 y 60 días debería estar caminando de manera normal.
-¿Va a tener una vida como la que tenía antes?
-Sin dudas. Es decir, no va a poder jugar un partido de fútbol como por ahí lo hacía hace un tiempo, pero hoy Diego está cerca de los 60 años y es normal que no lo haga. Va a poder jugar a la pelota con su hijo, con su nieto, pero ya no podrá patear en un picado con profesionales.
El doctor Eyharchet tiene 37 años. Es médico traumatólogo y ya tiene una rica experiencia con futbolistas. Desde hace tres años es el médico de Chacarita, pero también trabajó en Tigre. Por sus manos pasaron varios jugadores a quienes "les devolvió la vida" como, por ejemplo, Aldo Duscher, quien en su momento también sufrió con sus rodillas. Pero Diego no es un paciente más. Lo sabe, aunque él defina a la intervención con el "Diez" como "una cirugía más".
-¿Tuviste nervios a la hora de tener entre tus manos las piernas más importantes del mundo?
-No, la verdad es que me di cuenta de a quién estaba operando cuando terminé. Anoche descansé muy bien, preparé todo el equipo y operamos como siempre. Es lógico que siendo Maradona el paciente no es uno más y mucho menos por la forma en la que se tomó la operación.
-¿Por qué? ¿Qué hizo?
-Es que está en todo, no deja pasar nada. Eso que decían que estaba perdido, que no entendía las cosas. Por favor… La tiene clarísima. "No doy más, tordo, operame", me dijo. Vino porque ya no podía más y ahora él sabe que con el tiempo también se vendrá la operación de la rodilla izquierda, porque lo va a necesitar. Pero la verdad es que fue un gusto, trabajamos muy tranquilos y el resultado fue el esperado.
-¿Cómo sigue ahora su rehabilitación?
-El kinesiólogo Nicolás Papacena, que es miembro de mi equipo, será el encargado de la rehabilitación. Según dice el protocolo, en 48 horas Diego debería pararse y caminar con el andador. Yo suelo hacerlo en 24 horas, así que lo iremos viendo. Estará unos cuatro o cinco días internado y después seguirá con la rehabilitación de kinesiología y gimnasio. La recuperación la vamos a hacer en KyDep, que es nuestro centro de kinesiología y deporte, donde seguramente estaremos un tiempo largo, pero nos va a asegurar que Diego va a terminar con sus dolores y va a tener una vida normal.
Esa vida normal de la que habla el doctor es la que hoy busca Maradona. Acompañado por sus hermanas y Matías Morla, su abogado, el "Diez" comenzará su recuperación con un objetivo: "Volver a trabajar". Su apoderado ya evalúa las distintas opciones que van desde una selección (¿Bolivia, de cara a las Eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022?) hasta algunos equipos de Estados Unidos (Inter Miami FC realizó sondeos) y Chile (lo mismo sucedió con Unión La Calera, con vínculos con el empresario Christian Bragarnik).
Diego decidió ponerle pausa a su pasión y con dolor se alejó de Dorados de Sinaloa, donde dirigió durante casi un año y llegó a dos finales. "Necesito dedicarle tiempo a mi salud", dijo, y cumplió. Hoy comenzó una nueva etapa de la que salió con éxito. Su meta es estar dirigiendo antes de fin de año: aunque por recomendación médica ya no pueda prenderse en los "picados", en el banco siempre tendrá a mano su amado "perfume del pasto".