A dos días de lo que será el inicio de la temporada, nada menos que el choque de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores ante Atlético Paranaense, en Boca se encendieron las alarmas por una dolencia de Sebastián Villa que lo podía marginar del encuentro en Brasil, aunque finalmente se confirmó que no padece lesión alguna.
Luego del entrenamiento del domingo por la tarde, Sebastián Villa terminó con una molestia en el empeine de su pie luego de recibir un golpe. El cuerpo médico del Xeneize decidió esperar para ver la evolución del traumatismo.
Afortunadamente, el futbolista no presentó problema alguno y la noticia trajo tranquilidad al cuerpo técnico de Gustavo Alfaro. Este martes por la mañana, el colombiano de 23 años será exigido en lo que será el último entrenamiento del plantel en Ezeiza. Al mediodía la delegación volará para Curitiba.
De no presentar algún inconveniente Villa será uno de los titulares en el Arena du baixada el miércoles, desde las 21.30. Claro que de lo contrario, Lechuga ya tiene en mente los dos nombres que más posibilidades tienen de ocupar ese lugar: Cristian Pavón y Eduardo Salvio, que podría hacer su debut con la camiseta azul y oro tras ser uno de los refuerzos incorporados en este mercado de pases.
Alfaro celebró esta buena noticia a que venía con algunas situaciones que le trajeron dolor de cabeza, como que no podía contar con Lisandro López (desgarrado) y Carlos Izquierdoz (suspendido), su zaga titular. Tampoco dispondrá con Darío Benedetto, que aunque ya está vendido al Olympique de Marsella, la idea era que formara parte de esta serie; sin embargo, el Pipa sufrió una lesión en el isquiotibial izquierdo que lo relegó del encuentro de ida.
Es así que, ante la salida de Villa, Boca formaría con: Esteban Andrada; Marcelo Weigandt, Paolo Goltz, Junior Alonso y Emmanuel Mas; Cristian Pavón o Eduardo Salvio, Nahitan Nández, Iván Marcone y Alexis Mac Allister; Mauro Zárate y Ramón Ábila.
Por otro lado, el mediocampista italiano Daniele de Rossi se entrenó hoy en Italia, luego de haber acordado retrasar su llegada a la Argentina para el próximo jueves a la madrugada, con el fin de no quitar protagonismo al cruce de octavos de final de la Libertadores, el principal objetivo del club de la ribera en este segundo semestre.
De Rossi, que tenía una reserva en un vuelo para el domingo a última hora italiana desde Roma a Buenos Aires, finalmente charló con el director deportivo del "Xeneize", su amigo Nicolás Burdisso, y acordaron retrasar su arribo.
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