El mercado recién está abierto y Gustavo Alfaro marcó las pautas de las características de los refuerzos que pretende en Boca. Nicolás Burdisso tomó nota y trabaja para satisfacerlo.
Mientras Cristian Pavón parece ser el apuntado para atravesar la puerta de salida, el arribo de un volante versátil con llegada al arco rival que también colabore con el retroceso es el objetivo del director deportivo. Y uno de los que reúne esas cualidades es Eduardo Salvio.
El mediocampista del Benfica ya fue contactado por el Xeneize y aguarda por novedades respecto al futuro durante sus vacaciones. Está muy cómodo en el club portugués, donde milita desde 2010 y con el que alzó 14 títulos nacionales (también ganó el Apertura 2007 en Lanús y dos Europa League con el Atlético Madrid).
Fue convocado por Jorge Sampaoli en la última Copa del Mundo y fue titular en los primeros dos partidos ante Islandia (1-1) y Croacia (0-3). Y desde que arrancó el ciclo de Lionel Scaloni en la Selección sumó minutos en la goleada ante Irak (4-0) y la derrota con Brasil (0-1). El actual DT albiceleste no lo consideró en la nómina de 23 para la Copa América que está a punto de comenzar.
Una serie de lesiones impidieron que el Toto acumulara la cantidad de partidos que habitualmente registra en cada temporada. A fines de 2018 padeció un desgarro abdominal y, a principios de 2019, lo complicó una ruptura fibrilar en uno de sus muslos. No obstante, estuvo disponible en los últimos seis compromisos con las Águilas. Cosechó 13 cotejos disputados en lo que va del año aunque en la mayoría lo hizo ingresando desde el banco.
"Sufrí una lesión y no pude tener la continuidad que pretendía pero confío en mi trabajo. Gracias a eso voy a conseguir lo que quiero, que es ser titular. Tengo 28 años, todavía muchos años de carrera. Disfruto mucho y pienso jugar en el alto nivel mucho tiempo. Estoy donde quiero estar y me gustaría terminar mi carrera aquí. Todos saben del amor que le tengo al Benfica", declaró el hombre que acaba de consagrarse campeón en la liga portuguesa. Sin embargo, en Boca confían en convencerlo para que vuelva al país.
Desde la Ribera pedirán condiciones por la ficha del ex Granate que posee vínculo hasta mediados de 2022. Y la institución lusa exigirá no menos de 10 millones de dólares.
El operativo tentación ya se inició pero Salvio, que está completamente adaptado a la vida en Portugal, ni pensará moverse de territorio lusitano a menos que le igualen el salario que allí percibe: es condición sine qua non. Es decir que Boca, además de la erogación por su pase, tendrá que afrontar una alta suma mensual para mantenerlo.
En el actual plantel xeneize hay un ex compañero con el que mantiene una amistad: Lisandro López. Boca negocia con el Benfica hacer uso de la opción de compra del defensor (4 millones de euros) y baraja incluir el combo de argentinos para que formen parte estable de su plantel definitivamente.
La voluntad de los futbolistas que juegan en el exterior es fundamental para que las operaciones resulten exitosas en los clubes argentinos. El tire y afloje ha comenzado.
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