André-Pierre Gignac desembarcó en el fútbol latinoamericano luego de que Tigres de México decidiera romper el mercado a mitad de 2015 para traer el delantero francés, con la intención de conquistar la Copa Libertadores, que finalmente perdieron con River por un global de 0-3.
El goleador venía de ser la figura del Olympique de Marsella, conducido por Marcelo Bielsa, y sorprendió al elegir al elenco de Nueva León como su nuevo destino. Claro que detrás de su decisión había una razón. "La verdad es que yo vine por la Libertadores, era mi sueño", confesó el galo, de 33 años, en una entrevista brindada a Fox Sports, tras el último campeonato obtenido por Tigres en la Liga de México.
"Yo lo veía a Boca cuando era chiquito. Marsella se parece mucho a Boca en la afición y la sangre caliente. A mí me dolió muchísimo (no poder ganar la Copa frente a River)", reveló el atacante que ya lleva cuatro temporadas en Tigres de la UANL.
A pesar de que ya quedó atrás aquella final disputada ante el Millonario, Gignac recordó el buen planteo por parte de Marcelo Gallardo. "No es nada fácil jugar contra equipos sudamericanos. Los equipos argentinos tienen mucha experiencia en esa competición. La verdad que los argentinos tuvieron otro nivel de inteligencia", comentó.
Al futbolista le restan dos años de contrato con su actual equipo, en el que declaró sentirse muy cómodo y con la ambición de conseguir un título internacional.
"Nunca en mi vida podría haber imaginado que el club de Maradona y Riquelme me llamaría, hablamos de clubes míticos, incluso pude jugar con Ibrahimovic también, pero tengo realmente todo para ser feliz en Monterrey", había declarado en abril cuando reconoció que desde el club de la ribera consultaron por sus condiciones.
Habrá que esperar si en este nuevo mercado de pases Boca realiza un intento por el francés que disputó el Mundial 2010 con su selección y que lleva 593 partidos oficiales y 246 goles convertidos. Tal vez, si se reflota la oportunidad de que Darío Benedetto emigre a Europa…
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