El día que Néstor Kirchner bajó en helicóptero en la cancha de Racing para motivar a los jugadores con televisores

—Néstor, ahora que se viene Boca, ¿no te animás a regalarle algo a los jugadores para motivarlos?

—Sí, claro, ¿pero qué puede ser? No se me ocurre nada.

—Había pensado en unos televisores ¿Qué te parece dos LCD de 46 pulgadas?

—Dalo por hecho. Si ganan, se los llevo al entrenamiento. Y si necesitás una mano para armar el equipo, no dudes en llamarme.

El diálogo entre Néstor Kirchner y Ricardo Caruso Lombardi se dio en los días previos al clásico ante el Xeneize. A pesar de haber tenido la angustiosa experiencia de la Promoción frente a Belgrano un año antes, la Academia continuaba sufriendo el acecho de los promedios, y la llegada del técnico especialista en la salvación generó un revuelo en Avellaneda.

La democracia había regresado al club, pero la herencia del gerenciamiento había dejado los números en rojo. En Racing no había un presupuesto acorde a un equipo de Primera y los ingeniosos métodos aplicados por el entrenador para incentivar a sus jugadores se basaban en acuerdos que lograba concretar el DT con personalidades fanáticas de la Academia que quisieran colaborar con la causa.

"Tengo algunos vagos recuerdos porque era muy pibe. La idea de acercar a Kirchner fue de Caruso, porque era hincha de Racing. El club estaba tan mal que había que sacar premios de cualquier lado", rememoró a la distancia Franco Zuculini, uno de los goleadores que festejó en el Cilindro durante el 3 a 0 a Boca.

La iniciativa había sido un éxito. El incentivo del ex Jefe de Estado sirvió para que la Academia concretara una victoria histórica ante su gente. "Cuando ganamos le cambié los 2 televisores de 46 pulgadas por 4 de 40, que era lo que me habían pedido los jugadores", detalló Caruso Lombardi en diálogo con Infobae.

La promesa de Kirchner no tardó en cumplirse. En los días siguientes al eufórico triunfo el ex Presidente descendió de los cielos con los electrodomésticos solicitados por el DT. "Llegó por sorpresa al entrenamiento. Igualmente, en el vestuario se sabía que algo raro iba a pasar, porque había conversaciones entre los más grandes que hacían suponer algo extraño", reflexionó Zuculini sin olvidar ningún detalle de lo que significó el aterrizaje del ex mandatario al club de sus amores: "Bajó en helicóptero y saludó uno por uno a todo el plantel. Después nos dedicó unas palabras motivacionales".

"Yo no era muy consciente de lo que estaba pasando. Me acuerdo que quería saludarlo porque había sido el presidente de la Argentina, pero si no me interesa la política ahora, imaginate en ese momento que tenía 17 años", recordó para Infobae el actual volante de Colón de Santa Fe.

La mirada de José Luis Martínez Gullotta fue distinta, dado que el ex arquero advirtió que el encuentro se dio por un compromiso que tenía Kirchner en un acto de la UOM: "En realidad nosotros no vimos nunca cómo llegó.  Estábamos entrenando en el estadio y supuestamente aterrizó en la cancha auxiliar. Él iba a un evento político organizado en el polideportivo del club y aprovechó el momento para entrar a saludar al plantel. Le sirvió porque salió en todos lados, y Caruso le mangueó los plasmas".

Los televisores de Néstor fueron sorteados entre los integrantes del plantel. Con una memoria envidiable, el carismático entrenador aseguró que los ganadores de los plasmas fueron Lucas Aveldaño, Claudio Yacob, José Manuel Chatruc y Tito Ramírez. "Igualmente no fueron los únicos que se llevaron cosas. Yo les regalaba de todo: equipos de música, ropa de Kevingston, relojes, zapatillas Brucap, cajas de vinos y champagne… Hasta un inodoro que hacía juego con un bidet y un lavatorio, pero como nadie se lo quiso llevar porque me dijeron que estaba loco, lo donamos al predio Tita Mattiussi", confesó Caruso.

Era como una especie de Sorpresa y media. En una entidad sin recursos, el DT movía sus contactos para que el sector privado contribuya con un plantel que quería evitar el descenso. "En ese tiempo yo me gané un equipo de música que todavía deben tener mis viejos. Había 2 ó 3 que se llevaron lo mismo, pero también había planchas y televisores. Creo que un gerente de una conocida empresa era hincha de Racing y también entregaba electrodomésticos para que hagamos sorteos en el plantel", explicó Zuculini.

A pesar de haber comenzado el Clausura con resultados adversos (1-3 con Lanús, 1-4 con Huracán y 0-2 con Independiente), lo que generó la desvinculación del Chocho Llop y la incorporación de Lombardi, Racing terminó el torneo en el quinto puesto, a 10 puntos de Vélez, que se quedó con el título. "No había plata para nada. Yo tuve que armar un equipo con todos jugadores del ascenso y cuando me fui empezaron a llegar figuras como Gio Moreno y Teo Gutiérrez", se lamentó el técnico que recibió una de las ovaciones más conmovedoras en el Cilindro.

"Si te gusta un jugador, avisame que vamos a tratar de traerlo; así nos salvamos de una vez", le había dicho el ex funcionario al entrenador en el encuentro que se dio en el Presidente Perón. "Una semana después nos volvimos a encontrar en un evento relacionado con Granados en Ezeiza y me invitó a que me suba al helicóptero con él", recordó Caruso entre risas.

—Dale, venite conmigo así vamos hablando de Racing— lo invitó Kirchner.

—Pero ni en pedo, ¿estás loco? Mirá cómo se me vuelan los pelos. Yo ahí no me subo ni de casualidad— respondió el entrenador.

—Pero no seas cagón, dale que te llevo— insistió el ex Presidente.

—No hay ninguna chance, después hablamos tranquilos cuando quieras, pero yo ahí no me subo— cerró el DT.

Los insólitos métodos para incentivar a los jugadores sirvieron para que la Academia se quedara en Primera. Sin embargo, el ciclo de Caruso Lombardi terminó en la octava fecha del Apertura siguiente luego de 4 empates y 4 derrotas. "Nunca llegamos a hablar de nombres para incorporar, pero me di cuenta que sabía mucho de fútbol. Me decía que le gustaba el equipo y siempre se mostró muy respetuoso. Nunca me pidió que pusiera o sacara a nadie", concluyó el entrenador. Tras la muerte de Kirchner en 2010, la Comisión Directiva decidió instalar una gigantografía con la imagen del ex mandatario en el Presidente Perón.

Su relación amorosa con la Academia se inició durante su infancia en Río Gallegos y su legado lo continuó Máximo, su hijo. La última vez que su familia visitó el Cilindro, fue en el acto central de Unidad Ciudadana en octubre de 2017, antes de las elecciones legislativas. Por ese antecedente, en los pasillos de Avellaneda se aventuran a suponer un posible cierre de campaña presidencial del binomio Fernández – Fernández. El vínculo entre la política y el deporte se mantiene tan firme como el sentimiento de Néstor por Racing.

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