Algunos fanáticos del fútbol nostálgico recordarán a Diego Klimowicz, un delantero alto y de cabellera rubia que se destacó en Instituto de Córdoba y tuvo un breve paso por Lanús, aunque su mayor esplendor lo tuvo en el fútbol alemán. Allí, vistió las camisetas del Wolfsburgo, Borussia Dortmund y Bochum a lo largo de ocho temporadas en las que convirtió 86 goles.
Casi como una paradoja de la vida, como un déjà vu que se vuelve a repetir, esta mañana el apellido Klimowicz volvió a ser noticia en territorio germano, pero no se trató del ex futbolista de 44 años, sino de su hijo, Mateo, que se convirtió en nuevo jugador del Stuttgart y, al igual que su padre, tendrá la chance de jugar en la Bundesliga.
El fichaje sorprendió debido al gran salto dado por Tetu, apodo con el que se lo conoce, ya que pasó de la Gloria de la Primera B Nacional a uno de los equipos de las principales ligas de Europa.
La institución cordobesa cerró la transacción del joven atacante de 18 años en 1,5 millones de euros por el 90% de su ficha. Además, recibirá un plan de carrera por 400 mil euros más por objetivos.
Instituto ya informó qué hará con el dinero del pase de Klimowicz: "Se da a conocer que los ingresos de la venta de Mateo Klimowicz serán utilizados para saldar y cumplir con todos los compromisos asumidos y cancelar la primera cuota de la Convocatoria de Acreedores. El remanente será dispuesto para obras de infraestructura a comunicar", expresó la institución en un comunicado oficial.
El delantero sumó 38 partidos a lo largo de tres temporadas en el equipo albirrojo y anotó seis goles (cinco en la actual temporada).
En el Viejo Continente buscará, al menos, repetir la trayectoria de su padre, que se ubica como el sexto latino con más goles en la historia de la liga alemana (70).
Seguí leyendo: