"Me motiva seguir jugando con esta camiseta, la gente, la hinchada y seguir ganando títulos". En el inicio de la pretemporada, Carlos Tevez reveló las razones que lo llevaron a querer tener revanacha. A intentar despedirse del fútbol por la puerta grande.
Hoy el Apache cumple 35 años y no será un aniversario más: a fin de año vence su contrato en Boca y, salvo un golpe de timón, colgará los botines después de dieciocho años de carrera.
El capitán xeneize cuenta con el respaldo de Gustavo Alfaro, luce la cinta de capitán y lleva la 10 en su espalda. Y además, se carga la responsabilidad de conducir a los más jóvenes: "Hay que incentivar a los chicos para dar aún más porque no alcanzó con lo que dimos. Los que queremos a Boca estamos acá y vamos a ponerle el pecho a Boca como siempre".
Todavía no exhibió su mejor cara futbolística y por el momento parece correr con ventaja por delante de Mauro Zárate. El domingo pasado generó la infracción del penal que Darío Benedetto cambió por gol y está vigente. "Soy uno de los más viejos pero físicamente me siento muy bien. En lo anímico voy a ir agarrando confianza partido a partido. Se me hizo difícil tener confianza en los últimos años, eso me está faltando", analizó.
Boca comenzó un año movidito: no da por perdida la Superliga (a 11 puntops del líder Racing con un partido menos), disputará la final de la Supercopa Argentina ante Central y ya mira la Libertadores en la que debutará en marzo. Carlitos, con 26 trofeos en su vitrina personal, va por más. Quiere decir adiós al fútbol levantando una copa con la camiseta azul y oro puesta. Ese será uno de sus deseos a la hora de soplar las velitas.
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