El susto pasó en Núñez: finalmente, River y Belgrano llegaron a un acuerdo total y Matías Suárez ya es jugador del Millonario. El delantero, de 30 años, mañana se realizará la revisión médica (viaja a las 7 AM hacia la Capital Federal) y se pondrá a disposición de Marcelo Gallardo, quien se había comunicado personalmente con el futbolista para seducirlo y así reemplazar al emigrado Gonzalo Martínez (fue transferido al Atlanta United de la MLS) y a Rodrigo Mora (se retiró).
Si bien ya existía un arreglo de palabra desde el lunes, durante la jornada de ayer emergieron diferencias que hicieron peligrar el pase. Desde el Pirata reclamaban otros avales para respaldar la operación, además de solicitar la reducción del plazo de pago de las cuotas por el pase. Los cordobeses pretendían que el dinero por el 50% de la ficha que les pertenece (2.850.000 dólares) ingresara a lo largo de 2019. Pues bien, River accedió y las tensiones se aflojaron. Y Gallardo tendrá al atacante que tanto necesitaba.
La transferencia de Matías Suárez a River estuvo condicionada desde un comienzo. En un principio hubo malestar de los dirigentes de Belgrano porque sus pares del Millonario no consultaron al club previamente y se comunicaron directamente con el futbolista. Situación distinta a la de Racing, que también mostró interés por el delantero y preguntó las condiciones a la dirigencia pirata.
Esto se vio aún más agravado por la difícil situación por la que atraviesa el equipo cordobés, que se encuentra muy comprometido con los promedios y, a diez fechas del final de la temporada, se encuentra en zona de descenso. La derrota amistosa del lunes en el clásico frente a Talleres incrementó la presión sobre los dirigentes de Belgrano. Pero, aceptadas sus condiciones, terminaron accediendo a la transferencia.
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El Pirata ya contrató a su reemplazante: se trata de Diego Mendoza, futbolista que procede de Huracán, donde anotó diez goles en 55 partidos. Suárez, por su parte, buscará en Núñez exhibir su mejor versión, la que lo llevó a jugar ocho años en el Anderlecht de Bélgica y ser pretendido por gigantes como el Barcelona.
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