Con los amistosos en Mar del Plata ante Unión (miércoles 16/1) y Aldosivi (domingo 20/1) a la vista, Gustavo Alfaro empieza a enfocarse en lo táctico. Los jugadores de Boca descansarán hoy por primera vez desde que retomaron las tareas y se reincorporarán a la concentración en Cardales por la noche. Pero el entrenador y los dirigentes siguen con el teléfono celular caliente.
Las próximas horas serán determinantes para conocer quiénes serán los refuerzos y qué jugadores se despedirán antes del debut oficial contra Newell´s, el domingo 27 en Rosario (fecha 16).
Alfaro dio su primera conferencia de prensa entre los turnos de entrenamiento de ayer y brindó algunos conceptos importantes. Pero además, deslizó cuál es la posición en la que observa que a Boca le falta recambio: quiere sumar a otro zaguero central zurdo.
El DT nombró a José Luis Palomino, ex defensor de San Lorenzo que se encuentra en el Atalanta italiano. El tucumano de 29 años ve con buenos ojos regresar al fútbol argentino pero por el momento no hay acuerdo entre los clubes (el manager Nicolás Burdisso viajó a Europa para intentar cerrarlo). La alternativa que surge es Víctor Cuesta, a quien Alfaro conoce de su paso por Arsenal. El hombre que disputó la Copa América 2016 con la Selección es uno de los elementos más importantes del Inter de Porto Alegre.
En una de sus primeras declaraciones desde su arribo a la Ribera, el reemplazante de Guillermo Barros Schelotto habló de conformar un "plantel corto". No negó que puedan acordar las llegadas de otros jugadores pero las mismas, a excepción del central que le falta, estarán sujetas a las hipotéticas ventas.
En el arco, Esteban Andrada es el considerado titular y Agustín Rossi tiene un pie afuera (probablemente sea cedido a la MLS). En caso de que se concrete su préstamo, Marcos Díaz será su reemplazante.
Leonardo Jara y Julio Buffarini son las principales opciones en el lateral derecho, aunque existen sondeos por ambos. Alfaro permitiría la marcha de uno solo y, en tal caso, pediría otro marcador de punta en ese sector. En la izquierda, Lucas Olaza podría armar las valijas y entonces Emmanuel Mas y Frank Fabra (en la última etapa de su recuperación tras una operación de ligamentos cruzados de rodilla) quedan como dueños de esa plaza.
Con Carlos Izquierdoz, Paolo Goltz, Junior Alonso (también puede desempeñarse como lateral izquierdo) y otro zaguero, Alfaro quedará satisfecho en la cueva.
La firma del mediocampista colombiano Jorman Campuzano no se demorará y, ante la posible venta de Pablo Pérez, podría sumarse otro volante de juego. La otra compra que está prácticamente lista es la de Iván Marcone al Cruz Azul, por una cifra que superaría los 8 millones de dólares. El uruguayo Nahitan Nandez se despediría y allanará el camino al ex Arsenal y Lanús.
Wilmar Barrios es el otro jugador por el que Boca recibe constantes llamados. Alfaro anhela tenerlo en este 2019 pero tiene claro que será complicado retenerlo: si se va, no hay que descartar un nuevo 5.
Las líneas ofensivas se consideran bien cubiertas. De no haber una sorpresiva venta todo seguirá como está: el DT levantó el pulgar a Darío Benedetto, Wanchope Ábila, Mauro Zárate, Cristian Pavón, Sebastián Villa, los juveniles y Carlos Tevez, a quien pretende recuperar para que lidere al grupo dentro y fuera de la cancha.
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