El partido histórico que se llevará a cabo en el Santiago Bernabéu entre River y Boca tiene cada vez más ingredientes. Los incidentes en el Monumental, los reclamos a la Conmebol y la incertidumbre constante relacionada a la lucha por la gloria eterna son algunos factores que le imponen dramatismo al Superclásico exportado.
Así lo demostró Rodolfo D´Onofrio, presidente de la institución de Núñez, quien desde España le brindó una entrevista al diario El País y admitió que el compromiso internacional en la Casa Blanca del Real Madrid le parece "una vergüenza".
"Es algo increíble. Un sistema de seguridad que falló totalmente. No es solo un problema de Argentina, porque en Europa también hay episodios de violencia", dijo el directivo del Millonario antes de comparar los hechos que se registraron en el Antonio Vespucio Liberti con los que se observaron en el partido de la Champions League entre el AEK de Atenas y el Ajax: "El otro día vi un partido en el que no se tiraban piedras, se tiraban misiles".
En este sentido, el titular de la entidad porteña dijo que "River no tiene ninguna responsabilidad" de lo que sucedió en las inmediaciones del Monumental. "Así lo reconocieron las máximas autoridades de la seguridad de la Ciudad y la Nación", argumentó.
"Fueron 40 o 50 delincuentes que no tienen que estar en el fútbol y hay que exterminarlos para siempre. El hincha de River no es culpable de nada. No se debería haber permitido que el autobús de Boca pasara por un lugar donde estaban personas capaces de producir ese tipo de actos", continuó D´Onofrio.
Además, brindó un análisis de la situación actual del fútbol argentino, donde "los clubes no cuentan con un derecho de admisión como el que deberían tener". "Lo que hace falta es lo que se hizo en Rusia, un Fan ID", explicó.
El temor por nuevos incidentes provocan máxima tensión en Madrid. Según sus propias palabras, el presidente de River tiene serias amenazas en el presente: "Tengo 200 ó 250 hinchas de Boca que dicen que me van a matar", confesó.
En contraposición, los fanáticos de la Banda tienen una postura completamente distinta. "Los de River están 100% conmigo. No la barra brava, la gente, porque yo ni conozco a la barra brava. Jamás los traté. Lo único que quiero es que no estén más", concluyó.
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