El ajedrez se rige por un viejo axioma: "Primero la idea, después la jugada". Por eso, cuando entre agosto y septiembre de 2015, con diferencia de 20 días, el ambiente de los jaques y enroques perdió a dos de sus figuras, a Sergio Giardelli y Jorge Szmetan; un grupo de ajedrecistas, entre ellos, Ricardo Costianosky y el empresario Tomas Darcyl, junto a la figura del ex campeón mundial juvenil, el experimentado Oscar Panno, se unieron en la planificación de un tributo. Un torneo Memorial para luchar contra el fantasma del olvido y con la intención que el mismo tenga un lugar permanente entre las actividades del calendario nacional.
Y como los sueños a veces suelen volverse realidad, desde anoche, en el Palacio de Aguas Corrientes (el emblemático monumento histórico nacional, que se levanta sobre la Avenida Córdoba 1950), se lleva a cabo el Festival de Ajedrez Szmetan-Giardelli 2018. Sin dudas, el certamen más importante, en cuanto a fuerza ajedrecística de sus participantes, de la temporada e incluso el segundo en importancia de las competencias organizadas en el país. Es que la fuerza de juego de cada certamen la hacen la calidad de sus jugadores.
En esta ocasión participan cuatro de los cinco mejores argentinos en el ranking internacional: Sandro Mareco (N°1), Diego Flores (N°2), Alan Pichot (N°4) y Federico Pérez Ponsa (N°5), más Sergio Slipak y Tomas Darcyl. Junto a ellos hay varias de las principales figuras del continente, como los N°1, Axel Bachmann (Paraguay) y Eduardo Iturrizaga (Venezuela), los N°2 Alejandro Hoffman (Uruguay) y Julio Granda (Perú), el N°3 Yusnel Bacallao (Cuba) y el N°5 Felipe El Debs (Brasil).
El torneo alcanzó la categoría XIII de la FIDE, y así quedó a un paso de empardar a las dos competencias más fuertes realizadas en el país por organizadores locales: el Magistral Miguel Najdorf en 2001 (ganó Anatoly Karpov) y el IV Magistral Marcel Duchamp en 2012 (ganó Fernando Peralta), ambos categoría XIV.
La organización del festival Szmetan-Giardelli alienta a que los mejores ajedrecistas del país no tengan necesidad de viajar al exterior para medirse con rivales iguales o más potentes que ellos. Por eso a todos les interesa que la prueba se asiente y que se repita cada año. Así se manifestaron.
Sandro Mareco: "Para mí es una gran oportunidad de jugar un torneo tan duro en Buenos Aires. Y sobre los homenajes, sé que ambos, Szmetan y Giardelli eran excelentes personas. Lo traté más al Pato Giardelli; un tipo bárbaro. A Jorge no lo conocí tanto pero tengo muy buenas referencias de él".
Diego Flores: "El torneo es hermoso, ya lo estoy disfrutando. Szmetan y Giardelli fueron grandes ajedrecistas y muy queridos con los que compartí muchos momentos. El torneo es un lujo por las condiciones y por las posibilidades de enfrentar a los mejores de América sin necesidad de salir del país. Ojalá siga por muchos años".
Alan Pichot: "Contento con el debut (le ganó a Flores). El torneo es fuerte y está muy bien organizado. Es de primera clase y estoy contento con la oportunidad que me dieron. Para mí es un honor que tengamos en el país un torneo como este".
"Esto es fantástico. Es de lo mejor que nos pasó en el año en el ajedrez argentino. Además no sólo el Magistral, el Open también es muy fuerte y hay varios candidatos a ganarlo. La organización está a la altura del G20 y no del River-Boca", dijo con un guiño cómplice, el maestro Oscar Panno que es el Director del certamen.
Otro detalle interesante es la utilidad de los tableros sensoriales que se emplean en la prueba principal. Su mecanismo permite que automáticamente cada movimiento se refleje en una pantalla ubicada estratégicamente en la sala de juego. Si bien son unos pocos lo que caminan por el costado de las mesas observando cada partida, o más tarde se detienen frente a la pantalla para observar cualesquiera de los 6 juegos en disputa, ciertamente son muchos más los que desde su casa, frente a la compu, la tablet o el celular, pueden seguir al instante las jugadas del Festival que se realiza en Buenos Aires.
El Festival Szmetan-Giardelli 2018, que se llevará a cabo hasta el próximo viernes 14, se completa con un Open (torneo abierto para aficionados y profesionales) que convocó a 125 participantes y que repartirá 200 mil pesos en premios. En el amplio salón donde se desarrolla la prueba, el juego de ajedrez exhibe otra de sus grandes virtudes: la universalidad de su práctica. Es que pueden jugarlo y enfrentarse hombres y mujeres, niños o adultos, sin distinción de edades. Recorriendo las mesas uno podía observar al pequeño Ilan Schnaider, un niño de 7 años, actual bicampeón argentino de la categoría Sub 8, y muy cerca de él, al ex campeón mundial juvenil, Carlos Bielicki, de 78, o al ex campeón argentino Raimundo García, de 82.
Hoy, en el edificio de la Avenida Córdoba 1950, con entrada libre y gratuita se jugará la 2ª rueda.
Los homenajeados
Jorge Szmetan (1950-2015)
Fue socio del Club Argentino de Ajedrez, y en un paso fugaz por el Club River Plate, tomó clases con Julio Bolbochán, Raúl Sanguineti y Oscar Panno. Representó a esa entidad en los torneos de ajedrez Copa AFA. Por compromisos laborales, en los años 70 vivió en Brasil y fue campeón de Río de Janeiro. De regreso, en 1976 ganó el campeonato argentino y obtuvo el título de maestro internacional. Representó al país en tres olimpíadas: Niza 1974, Haifa 1976 y Buenos Aires 1978. En 1980 ganó el Magistral Konex. Tuvo empates con Bobby Fischer, Miguel Tal y Judit Polgar.
Sergio Giardelli (1955-2015)
Comenzó a jugar a los 5 años, y si bien sus primeros rudimentos los pulió en el Club Boca Juniors, más tarde se pasó al club de sus amores, River Plate. Allím junto al maestro Panno representaron juntos al club de Núñez en los campeonatos metropolitanos de 1ª división. Ganó los campeonatos juveniles de 1972 y 1973. Jugó el Mundial Juvenil en Manila 1974, donde se ubicó 5°. En cuatro oportunidades fue subcampeón argentino mayor. Jugó la Olimpíada de Buenos Aires 1978 y La Valetta 1980. Ese año, integrando el equipo argentino Sub26 logró el 3° puesto en el certamen disputado en México. En 1982 sumó un empate ante el campeón mundial, el ruso Anatoly Karpov.
SEGUÍ LEYENDO: