Nadie quiere perderse el partido entre Boca y River de la superfinal que definirá al campeón de la Copa Libertadores. El acotado espacio en la Bombonera –en comparación con la gran demanda– disparó los precios de la reventa y obligó al club a tomar medidas.
Desde el "Xeneize" informaron que presentaron una "denuncia formal en el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires" por reventa de entradas.
El club realizó la presentación ayer con la intención de terminar con estas prácticas ilegales. Se pusieron a disposición de la Justicia para que la investigación llegue "hasta las últimas consecuencias", al mismo tiempo que plantearon la idea de controlar los sitios de comercio online en cada partido que se juegue en la Bombonera para terminar con este tipo de actos.
Según explicaron, divisaron existencias de avisos publicitarios y comunicaciones ofreciendo ubicaciones para el encuentro en mensajes de WhatsApp, cuentas de Instagram y portales de Internet, que fueron enviados como pruebas para la denuncia.
En Boca aseguran que la venta de adicionales en los partidos de Copa se activa directamente en el carnet de cada socio y que el mismo es personal e intransferible a terceros.
"El club solicitó, una vez más ante la justicia, se inicie la correspondiente investigación, hasta las últimas consecuencias, para individualizar a los autores de la contravención y sancionarlos", advirtieron por intermedio de un comunicado.
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