Mauricio Macri, sobre el Boca-River en la Libertadores: "Ya tengo un estrés por mi trabajo, agregarle el de una final…"

En una conferencia de prensa desarrollada en Córdoba, el Presidente comenzó a palpitar el Superclásico y pidió por la "paz y armonía, más allá de que para el que pierda va a ser durísimo"

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En una conferencia de prensa en Córdoba, Mauricio Macri se refirió a la efervescencia que despertó el gran doble duelo entre Boca y River por la final de la Copa Libertadores que, según informó Conmebol, se disputará el 10 de noviembre en la Bombonera y el 24 en el Monumental. "Vamos a tener una final histórica que tal vez nunca más se repita, algo único, quiero decir que además de ser maravilloso desde el punto de vista deportivo, que va a tener además un atractivo mundial porque Boca y River es un partido conocido en el mundo del fútbol en todos los continentes, también es una gigantesca oportunidad".

Antes de la semifinal, Macri había planteado en una entrevista con una radio de La Rioja que prefería que ganara "un brasileño y no tener esta final porque son tres semanas de no dormir, es una locura, mucha presión". Pero tanto el Xeneize como el Millonario accedieron a la definición. Y el Presidente aclaró: "Lo que dije, lo dije desde el lugar del hincha porque, teniendo en cuenta que además soy presidente, ya tengo un estrés por mi trabajo, agregarle el estrés de una final… Yo prefiero, entre una final entre Boca y River, prefería una entre un argentino y un brasileño".

"Es una gigantesca oportunidad para todos los argentinos de demostrar este nivel de madurez que mostramos en los Juegos Olímpicos de la Juventud. Fue increíble, más de un millón de personas asistieron a los Juegos, hicieron horas y horas de cola para ver todas las disciplinas y todo salió perfecto. Lo mismo tenemos la oportunidad de demostrar en este Boca-River. Lo mismo, más allá de la pasión", agregó.

Luego, el mandatario recordó su pasó por el club de la ribera y envió un mensaje para que todo transcurra con tranquilidad: "Ustedes saben lo que significa para mí, fui 12 años presidente de Boca. Pero no deja de ser un deporte. Es una gran oportunidad de que podamos transcurrir este clásico con todas las cargadas del mundo, con toda la pica que tenemos entre Boca y River antes, durante y después, pero dejándolo en ese plano, en lo deportivo, en absoluta armonía y en paz. Y ahí creo que es muy importante todo lo que hagan los protagonistas, dirigentes deportivos, los técnicos, los jugadores, los hinchas, todos, sintiendo que es una fiesta".

"Lamentablemente, uno va a perder. Es así. Uno va a ganar y otro va a perder. Entonces, para aquel que pierda va a ser durísimo. Claramente va a ser durísimo, porque esta final no sé cuándo se puede llegar a repetir, si alguna vez se vuelve a repetir, pero no por eso vamos a dejar de disfrutarla", concluyó.

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