Es fanático de Boca desde chico, se encolumnó como dirigente detrás de Daniel Angelici en su primer ciclo en el club y se distanció en el segundo mandato. Intenta borrar los prejuicios de la gente que lo subestima por ser peluquero y no elude los cuestionamientos por su estrecha relación con Rafael Di Zeo. Pretende quedarse con el sillón presidencial: considera amigo al actual presidente, pero hace una fuerte crítica sobre su gestión. Fabio Cuggini compartió su sueño de ser presidente a Infobae.
SEGUÍ LEYENDO: El operativo que dejó a Rafa Di Zeo y Mauro Martín afuera del partido entre Libertad y Boca
¿Cómo nació tu fanatismo por Boca y cuál es tu historia personal?
Nací con sangre azul y oro, soy bostero de nacimiento. En mi época de adolescente me marcaron jugadores como Gatti, Sá, Pernía, Mouzo, Ribolzi, Benítez, Felman, Mastrángelo, García Cambón… siempre me movilizaron estos colores. Mi cultura es la de la calle: me crié en la Villa Carlos Gardel entre chorros y faloperos, pero nunca robé ni probé la droga. Mi viejo me daba con el cinto, estudié y hoy me la paso laburando en la peluquería cortando el pelito, mi pan de cada día para morfar.
¿Te sentís subestimado en el mundo del fútbol por tu profesión?
Puede ser que me carguen o subestimen. El argentino siempre es prejuicioso… Por ser peluquero tuve siempre el karma de que creyeran que era gay, aunque hoy con la apertura mental que existe se modificó todo. Algunos me ven como un payaso, lo sé y me la banco. Cada uno tiene derecho a pensar lo que quiera. Yo construí lo mío humildemente y sin plata de nadie. Hay gente que dice '¿no puede manejar una peluquería y va a manejar un club de fútbol?', hay otra que opina sin conocerme o porque le contaron…
¿Tenés ideas para abordar el plano futbolístico?
Quiero que Riquelme vuelva al club. Quiero que esté en el semillero, que maneje el fútbol. No le daría un título como manager o algo así, sería un consejero. Que esté en el armado y la incentivación de los pibes pero también tomando mates en el vestuario con los jugadores antes de salir a la cancha. Yo, en su momento, a Román lo critiqué porque tiraba bombas y sentía que le hacía mal al club, cuando en realidad debería haber tomado las cosas más personales con alguien en cuestión. Pero es el ídolo máximo del último tiempo.
¿Y qué pensás de un ídolo actual como Carlos Tevez?
Al hincha no le gustó que se fuera a China, lo perdona por su nombre, pero cambiar a Boca por dinero… Román resignó plata para volver. Yo con Carlitos me desilusioné, creo que tenía guita suficiente para no irse. El que habla es esclavo de sus palabras. Es un ídolo total, pero no lo quiero en el club, cumplió un ciclo para mí. Creo que está jugando por su relación con Angelici, no está al nivel que todos queremos y está a la vista de todos. Ningún presidente puede ser amigo de los jugadores. Dentro del club son empleados del club.
¿Cómo viste a Boca en el Superclásico?
Fue un equipo totalmente descoordinado. Le falta humildad, River jugó muy bien, con todo el estadio en contra, contra 12 jugadores. Y una cosa que no me gustó fue el cruce entre Mauro Zárate y Cardona, adelante de 45 mil personas y la televisión, fue muy triste, una falta de respeto al socio. Ojalá tengamos suerte en la Libertadores. Entre los caprichos de un presidente y un técnico, River nos terminó ganando bien, aunque me duela decirlo. A Guillermo, como ídolo, no lo discuto, pero como entrenador muestra ser caprichoso y la gente se da cuenta. Su ciclo es malo, le trajeron jugadores como si fuéramos el Barcelona y Boca juega mal. Guillermo tiene que acostumbrarse a las críticas porque es técnico, no jugador. Con un bicampeonato y una Libertadores (si gana la actual edición) no me conformo. Conmigo Guillermo no sigue.
¿Y a quién traerías?
Iría a buscar a Zlatko Dalic, el técnico de la Selección de Croacia. Es un tipo humilde que pudo haber sido campeón del mundo y sorprendió a todos. Sería el ideal. Hubo un sondeo de gente que me acompaña, le tiraron la idea y gustó. Aunque hoy en el país no podés armar nada porque no sabés qué va a pasar dentro de un año.
¿Tenés relación con barrabravas de Boca?
Soy amigo de Rafael Di Zeo, lo conocí hace muchísimos años y estuvo en momentos personales difíciles para mí. Cuando recibo afecto, doy afecto, eso no quiere decir que comparta un delito o cosas que están mal. Cuando sos claro en tu concepto, no sos cómplice. Quisiera saber cuántos dirigentes pueden hablar de esto como yo. A Rafa lo he cagado a pedos como hincha y ciudadano de cosas que hizo y no comparto, pero es bastante grandecito para saber qué está bien y qué está mal.
¿Tu relación con Di Zeo podría complicar tu llegada a la presidencia?
Él ya pagó con la cárcel por las cosas malas que hizo. Después hablan de reinserción, pero hay mucha hipocresía. La misma que existe en Boca, las mismas mentiras. El día que haga lo que no corresponde, me correré. Pero cuando un hermano tuyo cae en desgracia, seguirá siendo tu hermano. Quizás algún día te canses y tal vez me pase a mí. Si yo soy presidente y veo que él le hace daño al club, se tendrá que hacer cargo. Y la Justicia decidirá, no yo. A mí me cuestionaron una foto que me saqué con él y Mauro Martín en mi peluquería, pero nadie vio el mensaje contra la violencia y a favor de la vuelta del folclore. Lo mío es constructivo.
¿Ves a otros posibles candidatos para comandar la institución?
Crespi es mi papá político y familia. A mí nadie me manda a decir nada, pero yo pertenezco a Alternativa Boquense y quiero que algún día él sea presidente. Quizás se enoja porque diga esto, pero es así. Crespi, Amor Ameal, José Beraldi, César Martucci, Juan Román Riquelme, Mario Pergolini, Royco Ferrari son nombres potables de bosteros de raza que jamás serán cuestionados por ser hinchas de otro equipo o por la política nacional.
Cuggini se inició en la política del club como relaciones públicas de Angelici en el primer mandato (luego fue asambleísta hasta renunciar). Las "miserias humanas y lucha de intereses" lo alejaron de la mesa directiva, pero afirma que después de capacitarse y verse motivado por hombres del palo como Carlos Salvador Bilardo y Raúl Gámez, se decidió a lanzar su candidatura.
"Angelici va a quedar en la historia por haber vestido a nuestros jugadores de rosa. Yo no quiero un presidente cuestionado a nivel judicial, que tenga escuchas hablando por la designación de árbitros o esté más interesado en la presidencia del radicalismo", disparó el reconocido coiffeur, quien considera amigo al actual mandatario azul y oro pero lo critica fuertemente por su gestión.
Aclaró que algunos lo vinculan con Racing porque en los 80 iba al Cilindro de Avellaneda a ver a sus amigos Néstor Fabbri, Walter Fernández, Miguel Ángel Colombatti y Rubén Paz, pero que tiene sangre azul y oro. Y sí siembra polémica con los actuales directivos: "Quiero un presidente de Boca, no uno del que se diga que es de Huracán o de Independiente, como el 'pollo' de Daniel (por Christian Gribaudo)".
Cuggini se ilusiona con tomar el mando el año que viene: cree en la reforma de la Bombonera para evitar la mudanza y les promete a los socios adherentes que pasarán a la categoría de activos: "Todos no van a poder entrar a la cancha, pero me parece más equitativo que se vayan turnando en cada partido por grupos".
SEGUÍ LEYENDO
Gonzalito Rodríguez habló sobre el mal momento que vivió en la Bombonera
Este nuevo "Gallardazo" en La Bombonera acerca el final del "Mellizo" como técnico de Boca