En la victoria de la Selección 3-0 ante Guatemala el arquero fue Gerónimo Rulli. En la segunda prueba post Mundial, frente a Colombia, el director técnico interino Lionel Scaloni optó por devolverle la titularidad a Franco Armani, quien en Rusia había defendido la meta contra Nigeria y Francia. Pues bien, el portero de River, de 31 años, volvió a demostrar su jerarquía, con tres intervenciones oportunas para mantener cerrada su valla en el empate 0-0 en Estados Unidos.
La primera atajada de Armani ante su país adoptivo (es ídolo en Atlético Nacional de Medellín y estuvo a punto de atajar para la selección colombiana) fue a los 26 minutos del primer tiempo: Radamel Falcao probó de media distancia y el ex Ferro y Deportivo Merlo resolvió rechazando el balón rasante hacia un costado.
En el inicio de la segunda parte, a los 3′, volvió a surgir: Luis Muriel pisó el área y remató con potencia, pero encontró muy bien plantado a Armani.
En la tercera participación concluyente sacó a relucir su capacidad de reacción. A los 22 minutos de la etapa complementaria, Juanfer Quintero, su compañero en River, puso mano a mano a Carlos Bacca, que adelantó el esférico e intentó gambetearlo. Pero Armani, muy atento, salió a atorarlo y se jugó el cuerpo para obstruirlo.
Para concluir una jornada especial, el arquero récord en el Millonario (estuvo 965 minutos sin recibir goles) terminó el duelo como capitán: ante la salida de Nicolás Tagliafico (en su lugar ingresó Marcos Acuña), la cinta derivó en el arquero. Una muestra de la confianza que suma en el arco de la Selección.
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