Una tormenta sacude a la Confederación Sudamericana de Fútbol. En pleno desarrollo de las Copas Libertadores y Sudamericana, tres casos de alineación indebida acaparan la atención.
Primer caso: doble inscripción en una misma competencia: el argentino Jonathan Requena se alistó en la primera fase para Defensa y Justicia, pero el 30 de junio fichó para Deportes Temuco de Chile. Ante el reclamo de San Lorenzo, se le dio por ganado el partido de ida por 3 a 0, pasando a la próxima ronda de la Sudamericana pese a caer en los dos partidos (1-2 y 0-1). "Se declara ganador sin ningún fundamento. No dan ninguna explicación", se quejó el presidente de Temuco, Marcelo Salas.
Segundo caso: alineación indebida: Independiente elevó una consulta sobre Carlos Sánchez tras el 0 a 0 del partido de ida con Santos por octavos de la Libertadores. Sánchez adeuda un partido de suspensión desde que jugaba para River en 2015 (expulsión por agredir a un alcanzapelotas en cancha de Huracán). El club brasileño aduce que Sánchez no figuraba como sancionado en el sistema informático COMET, basándose en una lectura de pantalla de la ficha virtual del jugador donde se lee "Estado cerrado", aunque no se deja constancia de que la sanción hubiera sido "cumplida". José Carlos Peres, presidente del Santos, apuntó: "Independiente denunció a Conmebol una vez terminado el partido, y no avisó. Eso no es Fair Play". La Conmebol inició un expediente cuya resolución acaba de publicarse esta mañana, haciendo lugar al reclamo de Independiente, declarándoselo ganador del partido de ida por 3 a 0. (Art. 19 inc.1 Reglamento Disciplinario).
Sánchez podrá alinearse en el partido revancha (una decisión de último momento). En tanto, Santos manifestó públicamente su descontento y resignación por la sanción recibida, considerando que no tiene fundamento jurídico, declarando que seguirá todas las instancias "a fin de que se haga justicia". Al mismo tiempo, se insta a los hinchas por las redes sociales para que alienten al equipo que quedó obligado a vencer por goleada al Rojo para clasificar a los cuartos de final, bajo la consigna de "El fútbol se resuelve en el campo de juego".
Tercer caso: alineación indebida reiterada. Bruno Zuculini, volante de River Plate, debe dos fechas de suspensión tras su paso por Racing Club (2013), figurando en planilla en siete partidos de la Libertadores entre febrero y agosto: Flamengo, Independiente Santa Fe, Emelec y Racing; ingresando en tres de esos partidos. El pasado 23 de agosto, la Unidad Disciplinaria le informó a River que "por un error administrativo se omitió incluir al citado jugador como suspendido por 2 (dos) partidos", indicándole que deberá cumplirse la sanción. El mentado error remite a una carta enviada el 12 de febrero por correo electrónico al vicepresidente de River, Jorge Brito, donde se le informó que, de los jugadores consultados (incluido Zuculini), sólo Ignacio Martín Fernandez tenía "1 partido de suspensión pendiente de cumplimiento".
A renglón seguido se advierte: "Asimismo, informamos que el Reglamento Disciplinario de la CONMEBOL en su Artículo 11.8 establece: "La notificación realizada por la Unidad Disciplinaria tiene efectos solamente informativos, siendo exclusivamente responsabilidad de los clubes y de las asociaciones miembro que sus jugadores cumplan con aquellas, bajo advertencia expresa de las consecuencias reglamentarias que en caso contrario se pudieran derivar (p.ej.: alineaciones indebidas)". Ese texto erróneo lleva la firma de Francisco Figueredo, fallecido el 27 de julio a los 78 años.
Periodista deportivo paraguayo de vasta trayectoria, Figueredo fue muy valorado por el ex presidente Nicolás Leoz (acusado de corrupción por la Corte de Brooklyn en el FIFAgate), ejerciendo funciones como jefe de prensa, secretario general y gerente de la Conmebol. En los últimos tiempos, su salud se vio quebrantada, habiendo luchado con tenacidad contra una cruel dolencia que no logró superar. En tanto, Racing Club presentó un recurso de reconsideración contra la decisión de no sancionar a River Plate ante la mala inclusión de su ex jugador, tachando lo actuado de "arbitrario e injusto", bajo reserva de recurrir al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS). Este descalabro en parte se debe a las "Medidas de Gracia del Centenario" (Circular 1/2016-02-02-2016), cuando se decidió reducir a la mitad las suspensiones a jugadores, entrenadores, médicos y, también rebajar en sus dos terceras partes las clausuras de estadios. Esta inédita resolución fue firmada en soledad por Gorka Villar, hijo Ángel María Villar, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (REF).
Por entonces Gorka oficiaba como director general de la Conmebol y sus vínculos con Boca Juniors y la familia Grondona lo habrían inspirado para bajar de 8 a 2 partidos la clausura que pesaba sobre "La Bombonera", tras el incidente del llamado "gas pimienta". El sistema COMET ("Competition Management Expert System") fue adoptado en 2003 por la Federación Croata de Fútbol, como programa de gestión administrativa y deportiva (plataforma multiusuario vía internet). Luego fue aprobado por la FIFA convirtiéndose de uso obligatorio para las 211 federaciones. La Conmebol lo puso en funcionamiento en 2016 bajo el enunciado de "modernización y transparencia", aunque todavía no lo reconoce como fuente oficial de información. Según Ivica Pavic –director general de la empresa proveedora Analyticom- el sistema actúa por defecto en el rubro sanciones. Si en el informe del árbitro aparece una tarjeta roja, se registra automáticamente un partido de suspensión al jugador. La Unidad Disciplinaria analiza el caso y luego corrige el número según la gravedad de la falta cometida. Si el programa funcionara a pleno, el módulo "disciplinario" debería conectarse con el de "competiciones", dándose una señal de "alerta roja" sobre el jugador suspendido, impidiendo que éste pueda alinearse en la competencia de que se trate.
Según los hechos, esta función hoy no está operativa, sin que se conozca una comunicación oficial sobre los motivos. De ahí que rige la advertencia hacia clubes y asociaciones sobre la responsabilidad que les cabe a fin de que los jugadores cumplan las sanciones. La resolución del caso Zuculini, de no modificarse conforme al reglamento disciplinario (River corre el riesgo de ser descalificado de la Libertadores si se aplica el Art. 18 inciso l), puede provocar una hecatombe deportiva y económica ante el reclamo de los clubes que fueran eliminados de la competencia. En suma, por impericia, negligencia o culpa, se ha construido una obra maestra a la vista de todos, cuyas derivaciones podrían paralizar el fútbol en Sudamérica.
*Abogado -Director de Iusport.com Latinoamérica