Cuando él nacía en su Villa Mercedes (San Luis), en Boca se afirmaba una dupla central que marcó un antes y un después en la historia del club, conformada por el colombiano Jorge Bermúdez y Walter Samuel.
El niño de 14 años, categoría 99, llegó a Boca con sus sueños a cuestas y hambre de gloria, luego de haber dado sus primeros pasos en Sportivo Pueyrredón de su ciudad. El espigado mediocampista central fue probado como zaguero mientras saltaba en cada división de las juveniles xeneizes y se afirmó en la cueva. Sus 187 centímetros no eran para desperdiciar…
El año pasado comenzó a ser considerado para la Reserva y se transformó en referente de la Quinta dirigida por Sergio Saturno que se consagró campeona. Rolando Schiavi codeó a los mellizos Guillermo y Gustavo Barros Schelotto para llamarles la atención. Mientras sonaban los nombres de muchos marcadores centrales en cada mercado de pases, el canterano Leonardo Balerdi empezaba a pedir pista.
"Después de una operación de hombro se convirtió rápidamente en titular de su categoría y terminó jugando en Reserva en forma destacada. Es muy completo, no solamente muy buen jugador sino también buen profesional y persona. Tiene todos los adjetivos para ser un futbolista de elite", lo describió Claudio Vivas, coordinador de las inferiores de Boca, en diálogo con Infobae.
Está transitando un año frenético. Las escenas de su película transcurren vertiginosamente.
Fue inscripto en la lista de buena fe de la Copa Libertadores 2018 con la número 9 que dejó vacante Darío Benedetto por su lesión de rodilla. Y con la inclusión del Pipa para las fases eliminatorias, el puntano de 19 años se mantuvo dentro de la nómina con el particular dorsal que caracterizó a un tal Martín Palermo durante toda su carrera.
"Es un sueño estar acá, siempre quise estar en una pretemporada. Hay ídolos que tenía desde chico y es una alegría inmensa poder compartir estos entrenamientos con ellos", declaró Balerdi en Miami, durante los trabajos que se llevaron a cabo el mes pasado pensando en la temporada que acaba de comenzar.
Semanas antes, había cumplido otro sueño: Jorge Sampaoli lo seleccionó junto a otros jóvenes para ser sparring de la Selección Mayor en la Copa del Mundo de Rusia.
Se dio el lujo de marcar en las prácticas a Messi, Agüero e Higuaín, entre otras estrellas albicelestes. Y sus buenos rendimientos fueron advertidos por Lionel Scaloni, por entonces ayudante de campo de Sampaoli, posteriormente designado como técnico del Sub 20 que viajó al torneo de L'Alcúdia y actualmente interino de la Mayor.
Balerdi tuvo que despedirse antes de la pretemporada en Estados Unidos para viajar a España a representar a combinado nacional que levantó el trofeo en la final contra Rusia. Argentina gritó campeón y el chico de Boca fue una de las figuras destacadas.
Su tarea en territorio español no hizo más que aumentar el interés de uno de los clubes más poderosos del mundo: Barcelona. En la última semana, los dirigentes xeneizes evaluaron una oferta de 4 millones de euros de la entidad catalana que finalmente fue rechazada. De todas formas, las negociaciones no están caídas y no sería extraño que la próxima propuesta ronde los 10 millones de dólares (valor de su cláusula de rescisión).
Frente a la baja por lesión de Carlos Izquierdoz, la inminente salida de Santiago Vergini y los minutos que arrastran Paolo Goltz y Lisandro Magallán antes de disputar la revancha por los octavos de final de la Copa Libertadores contra Libertad de Paraguay en Asunción (este jueves), Leo Balerdi fue incluido en la lista de concentrados y posiblemente sea titular mañana con Huracán.
"Cuando le toque, lo va a hacer muy bien, sin problemas. No es prudente apurarlo, pero Valdecantos (preparador físico) y los mellizos lo están llevando bien", destacó Vivas.
Guillermo ve que el fruto de la cantera está maduro y Balerdi cumplirá el sueño de jugar al lado de Fernando Gago y Carlos Tevez, dos de los ídolos con los que tiene fotos en sus redes sociales.