Hubo al menos 300 mil solicitudes de tickets en la previa de ese partido. Eran demasiados los que querían estar allí. Finalmente sólo 102 mil fueron los aficionados que lograron ingresar al estadio CS VI Lenin de Moscú aquel 7 de noviembre de 1990 para ver un partido que luego sería legendario. El Spartak de Moscú de Oleg Romántsev recibía al Napoli de Albertino Bigon o, mejor, el Spartak de Moscú de Aleksandr Mostovoi recibía al Napoli de Diego Maradona para definir la llave de octavos de final de la Copa de Campeones 1990/91 (la actual UEFA Champions League). Habían igualado 0 a 0 en la ida disputada en Italia. Tocaba ahora definir en Rusia. Nada podía salir mal para el doble campeón italiano excepto una cosa impensada, improbable, una locura… que finalmente ocurrió. Diego no salió entre los 11 del equipo tano y a partir de allí una historia que El Príncipe Mostovoi recordó con la oportunidad del proceso mental de los hechos que sólo permite el paso del tiempo.
Mostovoi, uno de los más talentosos jugadores que dieron las tierras rusas en tiempos de la URSS, recordó aquel episodio en una entrevista con el sitio español Jot Down.
"Cuando nos tocó el Nápoles todo el equipo y todo el país se quedó alucinado. Ahora tenemos a Messi, Ronaldo… pero antes solo había uno: Maradona", recordó el ex futbolista nacido en San Petesburgo. "El primer partido lo jugamos allí, en Italia. En aquella época teníamos un equipo bastante bueno, éramos jóvenes, estaban Karpin, Kulkov y algunos más, y no le teníamos miedo a nadie, aunque el nombre de Maradona nos imponía respeto".
La ida de la llave se había jugado el 24 de octubre de 1990 en el estadio San Paolo de Nápoles ante 71 mil personas y finalizó igualado sin goles. "En Nápoles empatamos 0-0 aunque tuvimos unas cuantas ocasiones de gol claras, yo hice un palo con la cabeza e incluso pudimos ganar. Hay que tener en cuenta que el Nápoles en aquella época era un equipo muy potente, doble campeón de Italia. Pero lo más fuerte es lo que pasó aquí en Moscú…", prologó Mostovoi.
La historia, contada por el propio ex futbolista, continuó así el día que había que disputar la vuelta: "Al final, Maradona no llegó con el resto del equipo, llegó a Moscú el mismo día del partido con su avión privado. Tú imagínate, en aquel tiempo, que nos contaran a nosotros, que vivíamos en un sistema comunista, que había un jugador que viajaba en avión privado, cuando a veces no teníamos ni buenos guantes para los porteros. Cuando nos lo explicaron, yo pregunté que qué era eso de un avión privado, sencillamente no lo podía entender", sostuvo entre risas.
"El partido de vuelta fue en noviembre, aquí (en Moscú) ya nevaba. Luzhnikí, lleno a reventar (ndr: los registros oficiales informan que en aquel partido hubo una asistencia de 102 mil personas). Fue una locura. Maradona no salió de titular, se quedó en el banco. No sé si fue por el entrenador o fue él el que no quiso jugar. Terminamos la primera parte empatados a cero y luego ya salió él… no veas, el público se volvió loco (ndr: ingresó en el minuto 64 en lugar de Gianfranco Zola). Pudimos aguantar, porque en la segunda parte el Nápoles jugó mejor que nosotros. Acabamos empatados a cero, jugamos la prórroga y fuimos a penaltis, que de eso es de lo que se acuerda todo el mundo".
"Nos llamó Romántsev y nos preguntó que quién iba a tirar. Yo pedí ser el último porque pensaba que así me libraría y la tanda se resolvería antes de que me tocara. Nadie estuvo en contra… pero lo que acabó pasando es que mi último penalti acabó siendo el decisivo. Nosotros marcamos cuatro y un defensa suyo falló. Luego tira Maradona, marca… y ahí me tienes a mí, el último. Estábamos en el centro del campo esperando y me quedé solo. Fui andando al punto de penalti y no sé qué me pasó por la cabeza… y marco. Marco y ya está, me voy corriendo, todo el mundo vino a abrazarme y fue un momento increíble.
Lo que continuó, claro, no fue menos espectacular
"Fuimos a una cafetería después del partido que estaba al lado del estadio. Allí nos esperaban muchos amigos. Piensa que en Moscú tampoco había nada que hacer, en la ciudad había cuatro restaurantes, pero para nosotros, con veinte años, aquello fue increíble…", sentenció sobre aquella gesta El Príncipe Mostovoi.
Las formaciones de aquel partido
Spartak de Moscú: Cherchesov; Bazulev, Popov, Pozdnjakov, Kulkov; Karpin, Perepadenko, Shalimov, Shjmarov; Mostovoi y Gradilenko.
Napoli: Galli; Ferrara, Crippa, Baroni, Francini; Alemao, Corradini, De Napoli, Mauro; Zola (Maradona, m. 64) e Incocciati.
Luego el Spartak enfrentó en cuartos de final al Real Madrid de Butragueño, al que eliminó tras un 0 a 0 en la ida y un 3-1 en la vuelta, mientras que cayó en semifinales ante el Olympique de Marsella (global de 5-2 para los galos).
El documental
Esta historia, como la mayoría de las que involucran a Maradona, fue contada de todas las formas posibles. Una de estas le correspondió a National Geographic en su documental Maradona Confidencial, una producción de una hora estrenada el pasado junio que repasó los años más controvertidos y fascinantes de la leyenda del fútbol argentino.
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