El 10 de octubre de 2017, la Selección, con Jorge Sampaoli en el banco de suplentes, viajó a Ecuador a jugarse la clasificación a Rusia 2018. Allí recibió a la delegación Luis Juez, entonces embajador argentino en aquel país. Con sufrimiento, porque comenzó cayendo 1-0 antes del minuto de acción, Argentina se impuso 3-1 y sacó pasaje al Mundial, en el que vivió una experiencia turbulenta, con problemas internos y una eliminación temprana, en octavos de final, ante Francia.
Pues bien, 9 meses después, Luis Juez se destapó con revelaciones de aquellos "dos días y medio" en los que convivió con "los guasos" y ya advirtió, según su mirada, probadas muestras de lo que finalmente sucedió en Rusia. "Te dabas cuenta que Sampaoli tenía más humo que brasero de goma, no le daba bola nadie, loco", confesó en el programa Carnota 910, por radio La Red.
Luego, para ejemplificar la atención que el plantel le prestaba al DT en Ecuador, utilizó una analogía con plena utilización del humor cordobés: "Me hacía acordar a la relación mía con mi suegra, pobre, que se me cagó muriendo hace un mes y medio, viste; la vieja hablaba y nadie le daba bola, pobre. El tipo no tenía ninguna forma".
En 2017, Juez había cobrado protagonismo en dos oportunidades con relación al fútbol: había asistido a Atlético Tucumán en los problemas de logística que había sufrido por Copa Libertadores en Quito (finalmente, se clasificó a zona de grupos) y acompañado al Sub 20 en el Sudamericano de la categoría, en el que terminó sacando pasaje al Mundial gracias al empate de Brasil en el último partido.
"Esa clasificación fue milagrosa. Yo decía, vamos por el tercer milagro de Quito después de lo que pasó con Atlético Tucumán y el Sub 20. Y a los 47 segundos ya estábamos 1-0 abajo. Es un proceso que se agotó, yo creo que fue un error lo de Sampaoli. Era evidente", agregó.
Luis Juez, de 54 años, también fue sumamente crítico de la generación de la Selección que llegó a las finales del Mundial de Brasil 2014 y de las Copas América 2015 y 2016. "Lo que le pasó a Sampaoli le hubiese pasado a cualquier técnico; este proceso de Messi y sus amigos tenía que terminar así. Hoy el fútbol se juega de manera vertical, ni al papi se puede jugar como juega la Selección; fijate que el resto que juega así se volvió con la Selección", fue su análisis.
Banega y el propio Messi resultaron destinatarios de duras palabras por parte de Juez: "Los laterales nuestros no ponía sacar ni con la mano. Banega es un rastrojero. Al final el mejor de Argentina fue Mascherano. Y a Messi cuando lo ponés a jugar con la camiseta argentina es como si le pusieras una gargantilla de garrafas; la cabeza la baja y no la levanta nunca más", concluyó.
SEGUÍ LEYENDO: