Luego de su desprolija salida del cuerpo técnico de la Selección, donde se instaló una supuesta pelea con Jorge Sampaoli, Sebastián Beccacece hizo su presentación en Defensa y Justicia como líder del Halcón que quería volar alto en la Copa Sudamericana.
En el Norberto Tito Tomaghello de Florencio Varela, los dueños de casa buscaron el gol desde los primeros movimientos frente a El Nacional de Ecuador que se refugió contra el arco de Padilla. La superioridad bonaerense fue tan clara que durante los primeros 45 minutos el arquero de Esmeraldas se convirtió prematuramente en una de las figuras de la noche.
Con el empate sin goles, los jugadores conducidos por Favaro comenzaron a improvisar movimientos extraños para hacer tiempo. Como la igualdad imponía un favoritismo hacia los ecuatorianos de cara a la revancha en Quito, tanto Padilla como Montaños se convirtieron en artistas humorísticos para simular dolencias inventadas que despertaban la ira en los fanáticos del Halcón y las risas en los televidentes imparciales.
Cuatro remates en los palos y el constante dominio territorial hacían parecer injusto el resultado. Por lo tanto, cuando Nicolás Fernández abrió el marcador y Christian Almeida extendió la diferencia, la sonrisa se instaló en el técnico debutante. Con el 2 a 0 y la valla invicta, Defensa y Justicia se anima a soñar en el certamen continental. Los octavos de final están más cerca, pero para llegar a la fase de los 16 mejores el Halcón tendrá que hacer una escala en Quito, donde se disputará la revancha el próximo 31 de julio.
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