Mientras continúa el Mundial en Rusia, los equipos argentinos realizan la pretemporada y aguardan por la llegada de refuerzos. Boca hizo ruido con el arribo de Mauro Zárate, pero Independiente amenaza con romper el mercado: estaría tras los pasos de Paolo Guerrero.
El atacante de 34 años viene de disputar la Copa del Mundo con la Selección de Perú, a la que capitaneó. Pese a la eliminación en la primera fase (cayó con Dinamarca y Francia), se dio el gusto de convertir en el último compromiso ante Australia (victoria 2-1).
Surgido en la cantera de Alianza Lima, debutó como profesional en el Bayern Munich en Alemania, donde también defendió los colores del Hamburgo. En 2012 arribó al Corinthians de Brasil y en 2015 se mudó de San Pablo a Río de Janeiro para jugar en el Flamengo, club con el que tiene vínculo hasta principios de agosto.
Holan, que acaba de renovar su vínculo con el Rojo de Avellaneda, habría posado sus ojos en Guerrero, según informó el periódico incaico Líbero, que lo graficó en su tapa.
En su plantel, Independiente cuenta con Emmanuel Gigliotti, Silvio Romero y Leandro Fernández (se recupera de una lesión) como centrodelanteros. Pero Paolo sería una alternativa importante para afrontar la triple commpetencia: Superliga, Copa Argentina y Libertadores, certamen en el que afrontará los octavos de final ante el Santos brasileño en agosto.
LA SUSPENSIÓN DEL TAS
Paolo Guerrero había recibido una sanción de 6 a 14 meses por doping, pero tras una medida cautelar del Tribunal Federal Suizo, fue habilitado para jugar la Copa del Mundo. Hoy estaría en condiciones de jugar para el Flamengo.
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