La ONG A. VI. VI. (Asociación de Víctimas de violación) presentó esta mañana una denuncia por abuso de menores de juveniles del River, a partir del testimonio de una médica que trabajó en la pensión del club de Núñez entre 2005 y 2011, es decir, durante la última etapa de la gestión de José María Aguilar y el período en el que Daniel Passarella estuvo al frente de la institución.
La médica, de la que no se reveló aún su identidad, manifestó que "había por lo menos un captador, reclutador y/o abusador que pasaba dos o tres veces por semana a llevarse a los chicos de la pensión para prostituirlos". Los detalles de la denuncia, que marca que al menos son tres los chicos que sufrieron los abusos, resultan escalofriantes.
Fue la denuncia de corrupción de menores en Independiente la que alentó a la médica a acercarse a A. VI. VI para acercar su testimonio a la Justicia.
La profesional, según su versión, habría tomado conocimiento de los hechos luego de que un psicólogo, que también se desempeñaba en la pensión, le transmitiera su preocupación por las particulares reacciones de los chicos.
River Plate emitió un comunicado en el que se puso a disposición de la Justicia, a la que acudirá mañana para conocer en profundidad la denuncia y prestar "total colaboración".
Ahora bien: ¿cómo es la pensión? ¿Cómo funciona en la actualidad? La denominada "Casa River" se trata de un edificio de dos pisos, ubicado dentro del predio del club, detrás de los quinchos. Son 80 las futuras promesas que allí conviven.
Los chicos están divididos según su rango etario en dos alas dentro de las instalaciones: el ala infantil cuenta con 15 niños que tienen entre 10 y 12 años, y el ala juvenil, otros 65, que van de 13 a 18 años.
El club les provee alimentos, indumentaria y medicina. Además, cuenta con cuatro psicólogos especializados y otros cuatro asistentes sociales. Todos los niños están escolarizados a través del Instituto River Plate y por el sistema de educación a distancia.