La increíble historia del jefe de la barra de Banfield que cayó preso junto a su madre

Es un caso único en el mundo. La policía los detuvo el mismo día en la cancha entre destrozos, heridos y corridas. Aunque quedaron en libertad, la causa por resistencia a la autoridad continúa vigente. Vida y obra de una familia que maneja el poder de la tribuna

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Quedaron detenidos 72 horas por resistencia a la autoridad y luego recuperaron la libertad; la causa continúa (Getty)
Quedaron detenidos 72 horas por resistencia a la autoridad y luego recuperaron la libertad; la causa continúa (Getty)

A ella le dicen La Nancy. A él, Miguelito. Son madre e hijo.

Y protagonizaron el fin de semana una historia digna de mención en el libro Guinness de los récords: por primera vez en la Argentina y probablemente en el mundo entero, el jefe de una barra y su progenitora cayeron presos el mismo día, a la misma hora, por cuestiones ligadas a la tribuna del club de sus amores.

La novela, lejos de tener romance como las de Migré, está signada por la violencia y comenzó el 30 de enero de este año.

Ese día, Miguel Ángel Tuñinali, 39 años, volvía a la cancha de Banfield para el partido de ida por la segunda fase de la copa Pre Libertadores contra Independiente del Valle.

Miguel Ángel Tuñinali, el líder de la barra de Banfield
Miguel Ángel Tuñinali, el líder de la barra de Banfield

Hasta el año pasado, Miguelito tenía derecho de admisión por parte del órgano de seguridad deportiva de la Provincia de Buenos Aires (Aprevide) por manejar presuntamente las parrillas instaladas ilegalmente fuera y dentro del estadio.

Pero el barra puso un recurso de amparo en la Justicia y terminó ganando: le permitieron volver al estadio. Y lo hizo contra el equipo ecuatoriano. Pero nadie lo vio ingresar y desde el paravalanchas surgieron algunos cantos desafiantes.

Por eso, para el sábado siguiente, en el encuentro frente a Atlético Tucumán, se montó un operativo especial que recién se desarmó a los 30 minutos del primer tiempo.

Hasta ahí, Miguelito no había ingresado a la cancha. Pero en el entretiempo, las cámaras lo tomaron adentro liderando a la barra.

Un rápido paneo por las imágenes de seguridad lo encontraron ingresando sin ticket eludiendo los controles policiales. Por lo que se decidió detenerlo cuando finalizara el encuentro por esa contravención.

Así, cuando Miguelito salía en medio de su gente, la Policía lo apresó. Inmediatamente se desató la respuesta de la barra que generó destrozos, heridos y corridas.

Cuando parecía que la situación estaba calmada, emergió Nancy Azucena Burgos, 56 años, más conocida en el mundo de los tablones como La Nancy, y otra vez recrudeció la tensión.

Nancy Azucena Burgos (“La Nancy”), madre de Miguel Ángel
Nancy Azucena Burgos (“La Nancy”), madre de Miguel Ángel

Volvió a intervenir la Policía y, entonces, también quedó presa la madre, ambos por el delito de resistencia a la autoridad.

Pasaron 72 horas en la cárcel hasta que la Justicia de Lomas de Zamora les dio la libertad, aunque la causa contra ellos prosigue y todo indica que serán incluidos en la lista del derecho de admisión del Aprevide.

Claro que este fue el último capítulo de una saga interminable. Los Tuñinali dominan hace una década todo lo que ocurra en las inmediaciones del Florencio Sola.

Familia numerosa, hijo de un recolector de residuo llamado Horacio y de la Nancy, Miguel Ángel fue el que hizo la mayor carrera en la tribuna: a diferencia de su hermano menor Diego, que fue detenido el año pasado por revender entradas e infracción a la ley de estupefacientes, o de su otro hermano Ricardo, que terminó herido en un enfrentamiento interno de la barra en 2014 previo al Mundial de Brasil, Miguelito llegó a la cúspide en 2008, tras salir de prisión.

Había purgado una pena de cuatro años por robo calificado en 2002, aunque fue su pasión por el fútbol y la violencia lo que lo delató: recién fue apresado en 2003 cuando frente a las cámaras de televisión lideró una sangrienta batalla en la cancha de Vélez por el control de la barra y sus víctimas lo reconocieron.

(NA)
(NA)

Al salir de la cárcel, recuperó el poder en la tribuna apoyándose en su grupo proveniente del barrio Villa Niza.

Y desde ahí, fue un factor de poder omnipresente en la vida del club gracias a sus contactos con la dirigencia deportiva pero también con el Municipio donde muchos dicen verlo asiduamente en la Dirección de habilitaciones, en la de Tránsito y hasta en la de Recolección de residuos aunque no aparece en la planta permanente de trabajadores estatales.

En la institución, por su parte, parece amo y señor del Polideportivo de Luis Guillón donde la barra de Villa Niza hace campeonatos, fiestas y hasta tiene delegada la seguridad del predio.

En diez días, Banfield recibe a Boca presumiblemente con público visitante. Y esta situación de la familia Tuñinali le agrega tensión a un encuentro que de por sí ya está considerado de alto riesgo.

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