Pablo Aimar ofreció a los amantes del fútbol sus últimos movimientos dentro de un campo de juego. El Payaso se puso la 10 de Estudiantes de Río Cuarto, el club de su ciudad, para afrontar el choque contra Sportivo Belgrano de San Francisco por Copa Argentina.
En este caso, el único ejemplo no lo dio dentro del campo de juego con la pelota en los pies, sino que lo transmitió en los vestuarios del Estadio Antonio Cadini a sus compañeros.
El talentoso mediocampista surgido de River tomó la palabra en la arenga y lanzó un mensaje que quedará para siempre: "Les voy a decir dos cosas. Esas 9 mil o 10 mil personas que están acá quieren ser uno de ustedes. Yo mismo voy a querer ser uno de ustedes mañana. Los voy a envidiar, y con maldad".
En ese tono, les explicó a sus compañeros de equipo: "La sensación que vamos a sentir ahora al salir a una cancha llena no está en otro lado. Búsquenla donde quieran. No está en la falopa, no está en la noche, no está en las minas. No está en ningún lado. Salir a la cancha no tiene igual".
Mirándolos a los ojos, les pidió casi como un favor: "Disfrútenlo, y háganme disfrutar a mí".
A los 38 años, el futbolista que brilló en River, Valencia, Zaragoza, Benfica y Johor de Malasia, decidió salir por 90 minutos del retiro que había emprendido el 31 de mayo del 2015 tras disputar su último encuentro con la camiseta del Millonario.
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