En el Santiago Bernabéu se vivió una nueva edición de uno de los mejores clásicos que tiene el fútbol en la actualidad. En ese estadio, Real Madrid, flamante campeón del mundo, recibió al líder Barcelona.
En la primera parte reinó la paridad y ninguno pudo romper el marcador; sin embargo, no fue un espectáculo en el que carecieron las emociones, debido a que ambos equipos contaron con claras situaciones de gol.
Más allá del tanto bien anulado a Cristiano Ronaldo al inicio del juego, el luso casi abre el tanteador con un remate cruzado que Ter Stegen logró desviar con una pierna. La otra fue un cabezazo de Karim Benzema que se estrelló con el palo.
Por el lado de la visita, las mejores situaciones llegaron de la conección Paulinho-Lionel Messi. El brasileño recibió una magistral habilitación del argentino, pero su remate fue enviado al córner mediante una mano salvadora de Keylor Navas. El volante también probó con un cabezazo, pero nuevamente el costarricense evitó el peligro.
En el complemento se encendió la figura de Luis Suárez, quien tras avisar con una suave definición, fue el encargado de abrir el marcador. El uruguayo no dudó y aprovechó al máximo una buena contra de los de Enrique Valverde.
Antes de los 20 minutos se produjo la jugada que marcó el encuentro. Keylor Navas contuvo un remate de Luis Suárez, el uruguayo capturó el rebote y estrelló su remate en uno de los postes. Paulinho probó de cabeza y Carvajal evitó el tanto con la mano, lo que le valió la roja y una pena máxima para el Barcelona que Lionel Messi cambió por gol.
Lionel messi encendió la lampara, encaró, fue hasta el fondo y emitió un venenoso centro atrás, que Luis Suárez dejó pasar para que Aleix Vidal liquide el pleito en el adicionado.
Barcelona pisó fuerte en la casa de su clásico rival. Le lleva 14 unidades de ventaja al Real Madrid (tiene un partido menos) y prácticamente lo sacó de la carrera por el título.
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