Sucedió hace poco más de un año: el 11 de noviembre de 2016, Boca derrotó 4-3 a Sevilla en España, por la Copa Antonio Puerta. El duelo fue vibrante: Darío Benedetto abrió el marcador para el "Xeneize", empató Steven N'Zonzi, Cristian Pavón y Carlos Tevez estiraron distancias y el 3-1 lucía inalterable. Pero el entonces elenco de Jorge Sampaoli igualó con gritos de Franco Vázquez y Luciano Vietto. A los cuatro minutos de descuento, para redondear la calidad del espectáculo, nuevamente Tevez (en ese momento, a punto de desembarcar en el fútbol chino) puso cifras definitivas.
El duelo fue disputado en España, favorecido por la buena relación reinante entre José Castro, titular del Sevilla, y Daniel Angelici, titular del auriazul. Hasta allí, nada extraño. El amistoso se transformó en foco de conflicto recién hoy, en la Junta General Ordinaria de Accionistas del conjunto español. Allí, según cuenta el diario As, Agustín Martínez, uno de los accionistas opositores, le remarcó a Castro varios gastos extradeportivos, entre ellos, un jamón de 400 euros despiezado al corte, que tuvo destino de presente de cortesía para Angelici. El gesto tampoco supone nada extraño y hasta resulta habitual entre dirigencias; el punto es que se ubicó en el centro de la polémica por la naturaleza de los gastos.
La respuesta de Castro ante las acusaciones generó todavía más revuelo. "El jamón fue un regalo al presidente de Boca Juniors tras prometerme que su equipo vendría gratis a jugar el Trofeo Antonio Puerta, fíjese usted si salió barato el jamón", subrayó, en su particular defensa.
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