Javier Pinola reconoció hoy las falencias que afectan a River en todos los niveles, incluso las propias, las individualidades, que explican una a una el momento del equipo, que en una semana pasó de ser candidato en todos los frentes que peleaba a caer en un pozo profundo de juego y resultados. Ahora, cuando por delante solo queda la Copa Argentina (el sábado a las 19:15 disputará la final con Atlético Tucumán, en Mendoza), el plantel busca la manera de llegar en su mejor forma sabiendo que mentalmente, mucho más que en el aspecto físico, están severamente tocados.
Los principales conceptos que dejó el defensor
• "Grupalmente tenemos que estar fuertes. Tenemos una final por delante que hay que ganar, no queda otra y tratamos de conversar mucho, de charlar, de ser nosotros mismos los que busquemos las explicaciones a aquello en lo que estamos fallando".
• "Los resultados no son los esperados. Hay un poquito de todo, nos falta un poco más de compromiso general cuando atacamos y cuando defendemos. Son cosas en las que estamos fallando mucho y hoy los equipos no te perdonan".
• "Nosotros estamos sufriendo más de la cuenta con los goles que nos convierten y es eso: necesitamos un poquito más del compromiso de todos para encarar cada partido sabiendo que no alcanza con 60/70 minutos sino que con un poco más de la actitud que hoy estamos mostrando nosotros, los demás nos están superando".
• "A nadie le gusta que haya una rotación o salir pero ya lo conversamos con el técnico en la semana… A veces está bueno porque es un llamado de atención para que uno baje un poquito las revoluciones y vea en qué está fallando y tratar de mejorarlo".
• "Sin duda que yo soy el primero que no esta conforme. Creo que fueron seis meses en los que me tocó jugar pero en los que hay que adaptarse a muchas cosas. De a poco uno trata de tranquilizarse pero a veces cuando uno es tan autoexigente se mete muchas presiones y deja de tener el objetivo enfrente y empieza a querer hacer de todo y no hace nada, nada bien… Entonces queda todo a medias".
• "La semana pasada charlamos con Marcelo pero yo no tengo que pedirle explicaciones de nada. Él es el que dice quién juega y quién no. Es el indicado para tomar las decisiones. Él, como todo los técnicos, toman decisiones por el bien grupal y no contra un jugador. Me sirvió (salir) para tratar de pensar, para tratar de hacerme fuerte en la defensa, de complementarnos mejor con Jony (Maidana), de dar tranquilidad, y la mejoría con la pelota llegará cuando uno agarre más confianza".
• "Estoy totalmente compenetrado en la final (de la Copa Argentina). Luego será tiempo de descansar, de recapacitar y de hacer un análisis. Creo que ese tiempo me va a venir bien para recargar energías. También es cierto que no he tenido vacaciones desde aquella vez que me lesioné porque siempre estuve enfocado en la recuperación".
• "El golpe de la Copa (Libertadores) fue durísimo pero había que pasarlo lo más rápido posible. A veces es bueno tener una revancha rápida como lo era el Superclásico, pero era después de un gran golpe, y a pesar de que todos esperábamos más de todos en cuestión de funcionamiento con Boca, pese a tener un jugador menos, hicimos un partido aceptable. Después terminás perdiendo porque terminás perdiendo… no hay que buscar excusas sino tratar de corregir los errores".
• "No es que descuidamos el campeonato, pero por ahí nos faltó un poquito mas de compromiso y de actitud en general. Me ha tocado estar del otro lado, sé cómo se le juega a River y quizá desde mi lado fallé un poco en comunicarles a los chicos cómo se le juega a River: todos corren un poco más y tratan de hacer más. Hoy en el fútbol no alcanza con las individualidades, hay que tener mucha actitud para correr y luchar".
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