El árbitro tendrá un nuevo aliado. Este martes el sistema de Asistencia Arbitral por Video (VAR, por sus siglas en inglés) iniciará su período experimental en la Copa Libertadores en la etapa de semifinales y luego estará presente en la final de la Copa Sudamericana.
Pero, ¿qué hubiera sucedido si se hubiese implementado antes?
Uno de los casos más recordados es el insulto de Lionel Messi al asistente brasileño Emerson Augusto do Carvalho, en el duelo entre Argentina y Chile por la fecha 13 de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo a Rusia 2018, disputado en marzo de este año.
En aquella oportunidad el delantero del Barcelona insultó al juez de línea, pero tanto él como el árbitro principal no escucharon el agravio, por lo que "La Pulga" no fue castigado con expulsión. Luego, la FIFA actuó de oficio y le dio cuatro fechas de suspensión, gracias a la ayuda de las cámaras de televisión, aunque finalmente el comité de apelaciones retiró el castigo por pruebas insuficientes.
Lo curioso es que el VAR no hubiera colaborado.
Según explicó en un evento organizado por la Conmebol en Buenos Aires el árbitro brasileño Wilson Seneme, encargado de capacitar a los árbitros y quien en aquel entonces ya se desempeñaba como presidente de la Comisión de Árbitros de la Conmebol, el sistema "No hace lectura labial". En caso de que se detecte esta situación, no le será informada al árbitro y éste tampoco podrá exigirlo para revisar un posible insulto.
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