La agónica clasificación de la Selección al Mundial de Rusia 2018 se originó gracias a la estupenda actuación de Lionel Messi, autor de los tres goles con que Argentina le ganó 3 a 1 a Ecuador en Quito. Sin embargo, para muchos, la Pulga no fue el único "héroe" que se llevó todos los flashes por el deber cumplido.
El Brujo Manuel fue invitado y viajó con la delegación. Incluso, se presentó en el estadio Olímpico Atahualpa de Quito, donde estuvo en el vestuario con los jugadores y caminó por el campo de juego. Su presencia alteró el ambiente del fútbol y una semana después continúa siendo fuente de debate.
Javier Pipo Marín, presidente de Acassuso, reveló que fue él quien invitó a Manuel a Quito y aseguró que "no cobró un peso". Además, contó cuál fue el trabajo que realizó el Brujo, que le permitió a la Selección "atraer energía positiva" y terminar con la mala racha.
"Yo invité a Manuel a venir a Ecuador. Me lo recomendó un amigo. No es un brujo, es un espiritualista, católico, que habla de Dios y tiene mucha fe en sus oraciones", reveló Marín en diálogo con el programa La Repregunta, de FM Millenium.
A propósito de la tarea que llevó a cabo, el dirigente confirmó que dio vuelta a la cancha, estuvo en los dos arcos e ingresó a la zona de vestuarios con el permiso de la AFA. "Rezó en voz alta el Padre Nuestro", contó. Marín aseguró que el Brujo Manuel "no cobró un peso" y que viajó por invitación de los dirigentes.
Manuel es un hombre muy conocido en Estudiantes de La Plata, donde acompañó el exitoso proceso de Alejandro Sabella. Por lo bajo, la dirigencia de la AFA estudia llevarlo al Mundial de Rusia 2018 para continuar de racha.
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